El MAM presenta "Hombres con sombreros negros" en la Casa de la Dona de Mislata

La escritora María Jesús Cañada ha presentado en la Casa de la Dona de Mislata su novela “Hombres con sombreros negros”. La autora con la presentación y la lectura de algunos fragmentos, fue mostrando los entresijos de una historia escrita con valentía y humanidad. Que muestra al ser humano en momentos difíciles, y cómo la lucha por la supervivencia le lleva a remontar todas las dificultades.

Novela de ficción contemporánea que habla de unos hombres con sombreros negros que acompañan a Carlota a lo largo de su vida.

Carlota, en su madurez y rodeada de su gente, aprenderá a no juzgarlos, llorará con ellos, se emborrachará de sus emociones, los respetará e incluso descubrirá la forma de amarlos.

Novela que te aprieta las entrañas, transportando al lector a sentir el olor y el sabor que envuelve a Hombres con sombreros negros, rompiendo unos estigmas sociales narrados con frescura y naturalidad.

Acompañando en el desarrollo del acto de presentación, estuvo la concejala de concejala de Políticas de Igualdad de Mislata, Carmela Peña y la concejala de cultura Pepi Luján. El acto fue presentado por el coordinador del grupo literario del MAM, Rafael Roca. Un acto con gran acogida de público y que contó con el respaldo del MAM, que decoró la estancia, con una exposición fotográfica con las obras ganadoras de fotografía de los tres últimos años.

Un video promocional del libro, al que siguió el saludo del presentador que dio la bienvenida a los/as asistentes y pasó al turno de intervenciones, para concluir con la intervención de la autora, María Jesús Cañada.

Cañadas agradeció a los/as asistentes su presencia y a las personas que han hecho posible este acto:

“A Carmela Peña, concejala de Políticas de Igualdad de Mislata, por su amabilidad y facilidades para hacer esta presentación y a la concejala de Cultura Pepi Luján por sus reconfortantes palabras de apoyo y acompañamiento en  esta mesa.

Al MAM – Movimiento Artístico, en la preparación de este acto.

Al Ayuntamiento, por darme esta oportunidad y a vosotros mi público, por hacer un hueco en vuestra agenda y acompañarme esta tarde.

No sabéis lo importante que es para mí presentarla aquí, en este emblemático edificio. Hace algún tiempo, hubiese sido impensable que una mujer fuese la autora de esta novela.

A la salud mental, como a muchas mujeres, le ha pasado lo mismo… “ha estado invisible”. Por ello, os la presento en La Casa de la Dona.

Y os la muestro con una mirada valiente. No necesito utilizar un pseudónimo, utilizo mi nombre, y sí, soy mujer y hablo de salud mental.

Trabajo en sanidad. El trabajo pasa a ser una parte muy importante en nuestras vidas, mi trabajo me ha dado la oportunidad de aprender. Desde un mostrador de urgencias he visto el sufrimiento del paciente y no solo el de él, también el de sus familiares, esos que de forma silenciosa esperan en  la sala. A ellos nadie les pregunta si les duele.

Para entender a Hombres con sombreros negros hay que saber cómo y por qué nacen.

Que esté yo hoy aquí no es casualidad.

Nací en una casa en la que entró una enfermedad mental. Yo era  muy pequeña, pero tuve al mejor maestro. Él me contó la salud mental de una forma suave y al mismo tiempo... ¡tan real! Me enseñó abrir las ventanas cuando la oscuridad no me dejaba respirar, aprendí que eran habitaciones oscuras porque la sociedad les quitó el color. Entonces descubrí que, a veces, la oscuridad la crea el propio ser humano. Las puertas estaban cerradas porque esa sociedad tiró la llave al mar. Sin embargo, mi maestro me enseñó a bucear para encontrar esa llave.

Mi madre falleció por cáncer, en tan solo un año... se nos fue. Ese año miré a mis padres más que nunca, y vi en ellos un amor incondicional, ese amor que les había ayudado a superar días difíciles. Y entonces... lo entendí todo. Y se creó en mí una necesidad de contar al mundo una historia de ficción donde yo hablaría de la salud mental, tal y como me la habían contado a mí.

No iba a contar mi vida, pero sí hablaría de la enfermedad de mi madre. Y la enfocaría en el entorno, en todos aquellos que rodean al enfermo, para que la sociedad se dé cuenta ¡qué importante es! Y todo esto lo haría con un lenguaje sencillo, para el pueblo, porque la salud mental no tiene edad, sexo, religión, ideología política ni estatus social. En cualquiera de nuestras casas puede entrar, y os aseguro... que no avisa.

Me prometí hacerlo bien y me formé para ello, porque el mundo literario se merece un respeto. Esto ya no era mis cuentos ni mis poemas, esto sería una novela que enseñaría al mundo que: Educar en salud mental es… “dar vida a quienes lo están gritando”.

El pasado 4 de diciembre la presenté en mi pueblo, con mi gente, la dejé allí y me marché. Mis lectores cero fueron los que me animaron a editarla. Pero ahora me enfrentaba a los lectores reales ¿Entenderían que se puede hablar del dolor sin que duela?

En una semana ya comencé a recibir mensajes de esos lectores, ¿y sabéis qué fue lo que más me emocionó? Que sí habían recibido el mensaje de su autora y que estaban mirando con sus ojos a esa salud mental que hasta ahora había sido invisible para ellos. Y la estaban mirando como yo quería: con una sonrisa, con optimismo y sin ningún tipo de miedo ni vergüenza. Habían descubierto lo importante que es el entorno que rodea a la salud mental. Por lo tanto, objetivo cumplido.

Así que me he propuesto coger la maleta y presentar a estos hombres en todos los lugares que me inviten. Y por eso estoy hoy aquí. Muchas gracias.

Después se dio la oportunidad a todos los asistentes de que hicieran preguntas a la autora Mª Jesús, tras lo cual, y con la típica firma de ejemplares por parte de la autora, se dio por finalizado el acto.