Mislata evita las temidas inundaciones en Padre Llansol gracias a las mejoras en los colectores
El viernes se abrió la calle tras las obras y estas fuertes lluvias han demostrado la eficacia de las nuevas infraestructuras hidráulicas
Preocupado por la solución de este histórico problema, el gobierno de Manuel Corredera encargó en verano del año pasado un estudio de viabilidad de las infraestructuras hidráulicas de la zona de Padre Llansol para determinar las causas del problema de las inundaciones y proponer las soluciones urbanísticas que fueran necesarias. Desde que llegaron las conclusiones del estudio, recuerda el alcalde, “hemos trabajado contrarreloj para redactar el proyecto, obtener la financiación y ejecutar las obras. Y afortunadamente lo hemos conseguido: los vecinos de Padre Llansol y la ciudadanía en general estamos ahora mucho más tranquilos ante la alerta de gota fría que tenemos estos días en la Comunitat”.
Las obras comenzaron el pasado mes de julio porque el Ayuntamiento pretendía aprovechar las vacaciones estivales, ya que Padre Llansol es la calle de entrada a los cuatro colegios de la zona noreste de Mislata, y la calle se abrió nuevamente al tráfico el pasado viernes 8 de octubre, justo a tiempo de la llegada de la temible gota fría. “Lo más importante es que las obras han seguido los plazos previstos y que las mejoras están listas ahora, que es cuando más las necesitamos” explica Corredera, quien además confirma que la red de colectores “ha funcionado a la perfección y han soportado las persistentes lluvias que hemos tenido en este puente del Pilar”.
Dado que la acumulación de agua en la zona de Padre Llansol no tiene otra salida que los propios desagües de la calle, las obras realizadas tenían como objetivo aprovechar la capacidad de los colectores existentes, concretamente dos colectores municipales de 1200 mm de diámetro y un tercer colector del EMSHI de 1300mm. Hasta ahora, el cruce de los dos primeros colectores provocaba la sedimentación de partículas que obstruía el caudal de agua y no existía una conexión de éstos dos con el tercer colector del EMSHI para casos de colapso u obstrucción en alguno de ellos.
Gracias a este proyecto, se ha construido un arenero previo al cruce de los colectores con la Acequia de Favara para interceptar los sedimentos que transporte el caudal, se ha instalado un interceptor de aguas residuales previo al arenero y una conexión entre el colector municipal y el del EMSHI que permita aliviar caudal de uno al otro cuando entren en carga.