Las Microrreservas de Flora cumplen 15 años con 273 enclaves y el 84% de endemismos valencianos protegidos
Las Microrreservas son áreas ideadas para garantizar conjuntamente la protección, estudio y actividades prácticas de conservación de las plantas silvestres
La Red suma más de 1.900 hectáreas de terrenos protegidos
Centeno: “La figura de las Microrreservas es uno de los éxitos más notables de la Generalitat en materia de conservación”
“Estos enclaves –ha continuado Centeno- abarcan más de 1.900 hectáreas de terrenos específicamente declarados para garantizar la conservación, el estudio y el uso educativo de las plantas endémicas y amenazadas”.
La red de microrreservas se distribuye en 135 términos municipales, 103 en Valencia, 95 en Alicante y 75 en Castellón. En estos momentos las microrreservas contienen poblaciones de 1.500 especies de plantas superiores, lo que implica que el 50% de la diversidad valenciana para este tipo de especies está ya contenida dentro de la red.
Según ha explicado Centeno, las Microrreservas son áreas ideadas para garantizar conjuntamente la protección, estudio y actividades prácticas de conservación de las plantas silvestres, como repoblaciones, reintroducciones o restauración del hábitat dañado.
“Son figuras compatibles con el resto de tipos de espacios protegidos, como parques naturales, reservas naturales y parajes municipales, ya que, aunque dan protección al terreno y las plantas, no garantizan que las especies más singulares vayan a ser necesariamente objeto de un estudio detallado y de la aplicación de técnicas para mejorar la calidad de sus poblaciones”, ha indicado la directora general.
El objetivo de las Microrreservas ha sido, desde un principio, dar protección preferente a las plantas endémicas exclusivas españolas, que suman 365 especies presentes en la Comunitat Valenciana. “En estos momentos ya se ha alcanzado el 75 % de estas especies en partes de representación, al incluir a esta red de terrenos 270 especies de estas características.
“En cuanto a los 115 endemismos exclusivos o casi exclusivos del territorio valenciano, el porcentaje es aún superior, con un 84% de estas especies incluidas en la red”, ha afirmado Centeno, quien ha destacado que la red de Microrreservas “protege y asegura el estudio y la conservación de todos los efectivos silvestres conocidos en el ámbito mundial, como ocurre con la Saladilla de Peñíscola (Limonium perplexum) y la Saladilla de Dufour (Limonium dufourii).
En el caso de la Silene de Ifac (Silene hifacensis) o la Alfalfa arbórea (Medicago citrina), endemismos compartidos entre las costas e islas valencianas y las Baleares y donde, por tanto, todas las plantas silvestres ibéricas recaen en territorio valenciano, la red de microrreservas incluye todas las poblaciones naturales originarias conocidas.
Por otra parte, y según ha indicado la directora general, tras la reciente aprobación del Decreto 70/2009 del Consell, que regula la conservación de la flora silvestre e incluye la nueva lista de especies vegetales protegidas valencianas, la Conselleria de Medio Ambiente plantea ampliar los criterios, de modo que se incluyan también como especies objetivo de la red las plantas amenazadas que no sean endémicas, como ocurre con las de alta montaña, que en muchos casos son plantas alpinas o típicas del centro de Europa que aquí solo subsisten en las umbrías de los picos más elevados, como residuos de antiguos tipos de vegetación de los últimos períodos glaciales, progresivamente en retroceso y cada vez más amenazadas por el actual cambio global.
Algunas de estas especies, en particular los árboles amenazados como el tejo o el acebo, ya han sido tenidas en cuenta en la creación de nuevas Microrreservas en estos años, pero la Conselleria Medio Ambiente extenderá este mismo objetivo a las especies de menor talla, muchas de las cuales están representadas en el Catálogo de Especies Valencianas de Flora Amenazadas. Aunque más del 50% de las especies de dicho Catálogo se encuentran ya incluidas en la red de microrreservas, su incremento es un reto importante para los próximos años, ya que estos espacios protegidos son las áreas óptimas para desarrollar las acciones que se necesitarán para su recuperación.
La figura de las Microrreservas es, según las ha calificado Centeno, “uno de los éxitos más notables de la Generalitat en materia de conservación y un modelo que se ha exportado desde la Comunitat Valenciana a muchas otras regiones del mundo”.
