Merino presenta una rebaja fiscal generalizada con la que cada valenciano podrá ahorrar hasta 650 euros anuales

La síndica de Ciudadanos (Cs) en Les Corts valencianes, Ruth Merino, ha adelantado una propuesta de rebaja “generalizada, más amplia y ambiciosa” que la del Botànic, “por la que cada valenciano podrá ahorrarse 650 euros anuales al rebajar un punto los tramos de la base imponible del IRPF hasta los 65.000 euros." Así lo ha expuesto Merino durante su intervención en el Debate de Política General celebrado en el Parlamento autonómico, en el que ha incidido en la necesidad de que “la reforma fiscal beneficie a una gran mayoría de los valencianos”.

Además, ha instado al presidente Ximo Puig a “sentar las bases para el futuro y convertir a la Comunitat Valenciana en polo de atracción de inversiones, empresas y profesionales cualificados”. “La Comunidad Valenciana lo tiene casi todo para ser el mejor sitio para desarrollar un proyecto vital, pero se ve lastrada por un presupuesto que ha aumentado de los 17.000 a los 28.000 millones de euros en seis años y que no se ha traducido en más eficiencia sanitaria, más riqueza, más empleo ni más libertad, sino en más deuda, más asesores y más entes públicos”, ha añadido Merino para quien “con el Botànic, más es menos”.

“Han creado una Administración mastodóntica y, con ella, 15 entes cuyo coste anual roza los 450 millones de euros, ¿cuántas viviendas tuteladas, por ejemplo, podrían pagarse con esa cantidad?”, ha cuestionado tras anunciar que Cs propondrá una limitación del número de Consellerias “con el objetivo de evitar duplicidades y gastos superfluos en la Administración.”

“Hay otra forma de hacer política, la que se basa en los datos y busca resultados, y, lamentablemente, los números en la Comunitat Valenciana no son nada positivos”, ha añadido. “La sanidad pública está en quiebra, somos la quinta comunidad con peor ratio de médicos, la lista de espera quirúrgica se alarga hasta los 98 días y lo único que ha cambiado en la gestión sanitaria es la demonización de la sanidad privada por el sectarismo de Compromís y Podemos, incapaces de reconocer que la iniciativa pública y privada son complementarias”, ha manifestado.

Además, ha expuesto los datos en materia de política social, “con 11 valencianos muriendo al día sin haber recibido su prestación por dependencia”, o en educación, “con 18.000 menores estudiando en barracones en toda la Comunitat Valenciana”. Al respecto de la situación educativa, Merino ha manifestado su “indignación por aquello en lo que sí ha trabajado el tripartito: la imposición lingüística hasta no respetar ni el derecho de los alumnos a educarse en su lengua materna”. “No hay mayor enemigo de una lengua que quien trata de imponerla”, ha incidido.

Por ello, la portavoz parlamentaria de Ciudadanos ha propuesto al president de la Generalitat “planes estratégicos a largo plazo” para los grandes retos de la Comunitat Valenciana: un plan por la sanidad pública, por la juventud y por la educación.  “Hace un año ya se anunciaron decenas de propuestas que, en su mayoría, no han visto la luz. De los 40 millones del plan Avalem Dones, solo se han ejecutado 14; de los mil que iban a destinar al empleo juvenil, se han presupuestado 52, pero, probablemente, los incumplimientos que más abochornan sean la falsa reivindicación del trasvase Tajo-Segura, cuando el propio Gobierno central certifica hoy su recorte, o la eternizada reforma de la financiación autonómica”, ha añadido.

“Las soluciones difíciles a los problemas difíciles no dan rédito electoral, pero son las armas de la política sensata y responsable, y ahí es donde está Ciudadanos. No vamos a renunciar a una Comunidad Valenciana más libre, más igualitaria y también más rica, pero deje de ningunear a los valencianos, señor Puig, es el momento de elegir entre avance o parálisis, eficiencia o despilfarro, crecimiento o estancamiento”, ha concluido.