Concluye con éxito el curso de educación urbana para perros, promovido por el Ayuntamiento con el lema Ciudadanos de cuatro patas
Por una mejor integración de los canes en la vida social del municipio
Con el lema Ciudadanos de cuatro patas el Ayuntamiento de Manises ha organizado, a través de su Concejalía de Salud, un curso de educación urbana para perros que ha concluido hace tan sólo unos días y que comenzó en el mes de marzo con el objetivo de conseguir una mejor integración de los canes en la vida social del municipio.
El curso, gratuito y subvencionado en su totalidad por el Consistorio que dirige Enrique Crespo, ha constado de 36 horas de duración en las que se han alternado clases teóricas y prácticas y en las que, entre otros, se han tratado temas sobre alimentación, control veterinario, primeros auxilios, psicología canina o ejercicios de obediencia. Impartido por la Asociación para el Respeto y Convivencia con los Animales Domésticos y Salvajes (ARCADYS) y la Escuela de Adiestramiento Camp de Túria, las clases teóricas se han alternado con las prácticas, que se han realizado en los exteriores del Centro Municipal Les Simetes, en el barrio de San Francisco.
La concejala de Salud en Manises, Amalia Wollstein, ha afirmado que "una vez más el curso ha resultado muy satisfactorio. Esta iniciativa la emprendemos desde hace unos años dada la preocupación de nuestro Ayuntamiento por la buena integración y armonía de las mascotas con el resto de la población, siempre en el marco de una tenencia responsable".
Con este curso, desde el Ayuntamiento se ponen al alcance de los vecinos las herramientas para que no se produzca molestias a terceros o malos hábitos, que muchas veces son causas de conflictos vecinales o abandono de animales.
Mediante unas enseñanzas básicas el propósito ha sido, una vez más, conseguir una mejor integración del perro en la vida social del municipio. Para ello, el temario desarrollado en el curso ha tratado a fondo los aspectos que hacen posible que perro y dueño trabajen juntos, asimilando mediante técnicas contrastadas las bases de un conocimiento mutuo, satisfactorio y gratificante, introduciéndolos, desde el primer día, paso a paso, en los diferentes aspectos que conforman sus personalidades y psicología.
En las clases teóricas se han tratado aspectos relativos a la socialización, domesticación, hábitat, necesidades psicológicas o psicología canina. Además, se ha remarcado la importancia de seguir un control veterinario, cuidar la alimentación del can, su piel y pelo o respetar la higiene del animal. Especial atención se ha prestado también a la reproducción de las hembras o sus cuidados y a la prevención durante el celo y la maternidad.
Normas para el paseo diario, la aplicación y el cumplimiento de la Ley de Protección Animal, primeros auxilios o problemas psicológicos de los perros han sido, para muchos propietarios, la primera vez que se han tratado a fondo.
En las prácticas, se ha incidido especialmente en ejercicios de obediencia, desarrollo y control de carácter.
Ahora, y tras el curso, caminar junto al dueño sin tirar, detenerse en la marcha, permanecer quieto, sentarse, acostarse o acudir a la llamada han dejado de suponer una gran dificultad para los propietarios y para los propios perros.
