La corrección de desigualdades y la mediación, grandes apuestas sociales del primer año de gobierno socialista

El impulso para la instalación de nuevas empresas y la estrecha colaboración con las ya existentes son la apuesta decidida para corregir la alta tasa de desempleo en Llíria

A punto de cumplirse el primer año de legislatura, Llíria pondrá en marcha muy pronto un importante proyecto de rehabilitación y renovación urbanas, con el objetivo de revitalizar los barrios y zonas más degradadas, un factor importante de desigualdad social que los socialistas asumieron corregir.

Según contempla el convenio entre Llíria, la Generalitat y el Estado, alrededor de 4’6 millones de euros serán invertidos no sólo en la rehabilitación de viviendas y edificios, sino en dar un valor añadido a barrios en los que se concentran las principales desigualdades.

Es uno de los puntos donde el gobierno socialista ha concentrado más esfuerzos, a través de programas específicos como el servicio de mediación hipotecaria, la integración en la red de vigilancia de casos de violencia de género, así como la proyección de la nueva estación de la Policía Local más cercana a estos barrios.

Aún con todo, el factor que más ha marcado el trabajo del equipo de gobierno socialista ha girado en torno a dar respuesta a la tasa de desempleo que sacude la población con el estallido de la burbuja inmobiliaria. Corregir la tendencia de poca presencia de empresas en Llíria, con los acuerdos alcanzados para desbloquear el Polígono de Carrasses, pero dar respuesta a las ya instaladas en la primera fase de ese polígono, así como las existentes en Pla de Rascanya y el Collaico, o solucionar deficiencias existentes de accesos a la Cooperativa o las planteadas hace años por la empresa Tejas Borja, son la mejor inversión en empleabilidad de calidad y de largo plazo.

La colaboración entre el gobierno municipal y el Consell ha sido permanente, no sólo para sacar adelante esta importante inversión, sino en otros proyectos que son básicos para la cobertura de los derechos más elementales: la educación y la sanidad públicas.

En este sentido, el gobierno socialista ha colaborado estrechamente con el gobierno autonómico para la puesta en marcha, en breve, de las obras del futuro Instituto Camp de Túria, del que se obtuvo el compromiso firme de la Conselleria de estar completado durante esta legislatura. Esa infraestructura educativa es fundamental para poder dar también una respuesta adecuada y necesaria a la ampliación de los servicios de la Escuela Oficial de Idiomas y una ubicación digna y a la altura del gran trabajo realizado, aún sin medios hasta ahora, de la Escuela de Adultos.

Del mismo modo, gracias a esta colaboración entre instituciones, el Hospital de Llíria ya funciona a un mayor rendimiento, tras la reciente implantación del servicio de traumatología y muy pronto contará con mayores servicios como pediatría y obstetricia así como con mejores conexiones con el municipio a través de un servicio público de transporte que ha asumido exclusivamente el consistorio.

“La colaboración con el Consell debe seguir siendo nuestro estilo de gobernar porque es así como los procesos, para obtener servicios muy importantes para nuestros vecinos, han podido ponerse en marcha o al menos proyectarse como una realidad”.

Se sigue trabajando en cumplir con importantes retos como la puesta en marcha de una demanda vecinal histórica: la creación del Centro de Día para dependientes y personas mayores.