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La Concejalía de Tráfico y Servicios Sociales trabaja con la Comisión de Accesibilidad para regularizar el derecho a una plaza de aparcamiento de las personas con movilidad reducida

La Concejalía de Tráfico y Servicios Sociales trabaja con la Comisión de Accesibilidad para regularizar el derecho a una plaza de aparcamiento de las personas con movilidad reducida
  • Elena Vicente-Ruiz denuncia que “el nulo criterio del anterior equipo de gobierno nos ha llevado a una situación surrealista con 500 plazas reservadas para personas con movilidad reducida en La Vall”

La concejala de Interior, Elena Vicente-Ruiz, ha comparecido en rueda de prensa junto con José Villalba, el edil de Servicios Sociales, para hacerse eco del malestar que les ha trasladado la Comisión de Accesibilidad con las declaraciones de los dos grupos de la oposición al respecto de la regularización que se está llevando a cabo de los aparcamientos para personas con movilidad reducida.

La Comisión de Accesibilidad está formada por diferentes asociaciones: Frater, ONCE, Afaniad, entre otros, y técnicos del Ayuntamiento...Todos ellos han trabajado codo con codo con la Concejalía de Tráfico y la de Servicios Sociales y, fruto de ese trabajo, se presentó una reforma de la ordenanza reguladora de la tarjeta de estacionamiento para personas con movilidad reducida que, tal y como ha asegurado Villalba, “se aprobó en la Comisión de Asuntos Sociales por unanimidad de PP, PSOE e IU, y lo mismo ocurrió cuando la pasamos por pleno. Por tanto –ha continuado- nos parece una actitud hipócrita e irresponsable que tanto PSOE como IU hagan declaraciones demagógicas con este tema tan sensible, cuando ellos apoyaron la reforma de la ordenanza”.

Así, Vicente-Ruiz ha explicado que “la Comisión de Accesibilidad nos pidió una regularización en el reparto de aparcamientos para personas con movilidad reducida, ya que el nulo criterio del anterior equipo de gobierno había llevado a una situación en la que había casi 500 plazas reservadas para minusválidos en nuestra ciudad, lo cual es a todas luces desproporcionado”. La concejala de Interior ha asegurado que “los miembros de la Comisión de Accesibilidad estaban preocupados por esta situación, y por ello procedimos a la reforma de la ordenanza que regula estos aparcamientos. Ahora que estamos aplicando la ordenanza, la Comisión de Accesibilidad nos ha manifestado su disgusto por las declaraciones de los grupos de la oposición, que no están demostrando ninguna sensibilidad y, como siempre, anteponen sus intereses partidistas al bienestar de los ciudadanos”.

 

Los concejales populares han denunciado que se estaban produciendo situaciones totalmente irregulares, como por ejemplo personas que utilizaban la plaza de un familiar ya fallecido para estacionar su vehículo, o personas con plaza de garaje que querían también un aparcamiento en la puerta de su casa, por nombrar sólo algunos casos.

Así, Elena Vicente-Ruiz ha explicado que “lo que se ha hecho es enviar una carta a cada una de las personas que tenían una plaza de aparcamiento para personas con movilidad reducida para que nos remitieran la documentación que acredite que efectivamente le corresponde una plaza de estas características. Si la documentación que nos ha enviado cumple los requisitos que establece la Dirección Territorial de Servicios Sociales, esa persona tendrá su plaza”.

José Villalba ha indicado que “aquellas personas que tengan movilidad reducida, tengan carnet de conducir y acrediten que efectivamente utilizan su coche, por ejemplo para ir a trabajar, por supuesto tendrán una plaza pintada en la puerta de casa”. No será así si la persona minusválida no tiene movilidad reducida, o si ya tiene plaza de garaje, en cuyo caso debe hacer uso de la misma.

Así, el Ayuntamiento garantiza plazas personalizadas en la puerta de casa para aquellas personas que acrediten que la necesitan, y 45 plazas genéricas distribuidas por todo el municipio para que estas personas puedan estacionar. La policía vigila el cumplimiento de la ordenanza ya que las plazas personalizadas están identificadas con el número de matrícula del vehículo de la persona con movilidad reducida.

En el caso de ser una persona con movilidad reducida pero que no conduzca, se pintará en la puerta de su casa un acceso para garantizar que el vehículo que la transporte tenga acceso a su domicilio.

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