La joven alicantina que recorrió todo el país para enseñar a quererse a uno mismo

Raquel Ferrando, con 26 años al frente, salió desde Alicante el pasado 20 de marzo y regresó el 27 de noviembre en donde recorrió toda España para mandar un mensaje claro: quererse y respectarse hacia uno mismo. “La gente no tiene ni idea de cómo hacerlo y yo pues les ayudo”, ha asegurado la misma a elperiòdic.com.

La joven alicantina sufrió de bulimia con tan solo 20 años y por ello quiso incluso quitarse la vida. Una etapa que la marcó su vida y la forma de afrontarla, y es que según ella misma cuenta la bulimia es consecuencia de no saber cómo quererse, de no estar bien con uno mismo. Y eso, es lo que ella quiere reivindicar con este tipo de iniciativas. 

Durante ocho meses caminó por la península acompañada de su mochila y su tienda de campaña. Raquel nos cuenta que se puso una norma para el viaje: no gastarse nada de dinero ni para el alojamiento ni para el transporte. Es por esto que dormía en la tienda de campaña o en las casas cuando la gente la acogía.

Así pues, la comida tampoco fue un obstáculo para ella: o bien se acercaba a algún supermercado a comprarse algo con los 7,50 euros que tenía de presupuesto diario, o la gente la invitaba.

Sin duda, nos explica Raquel, su principal reto a superar fue la soledad, pues nunca había estado tanto tiempo sola. Ella ha declarado que lleva muy bien la soledad, pero que este viaje era ir mucho más allá. A pesar de esto, tenía las ideas claras. Tres motivos marcaron su decisión: le gustaba viajar muchísimo a pie, quería ver su evolución al estar sola y demostrar que las mujeres pueden hacer viajes así.

Le preguntamos por los momentos que más le han marcado, y la joven alicantina no duda a la hora de responder pues aunque  muchos fueron los momentos que le han marcado, sin ninguna duda, la experiencia que más recuerda, tanto buena como mala, fue un día de tormenta que se quedó a dormir con su tienda de campaña a un botellódromo. Con el mal tiempo que hacía, se le voló la tienda y ella, con todo el cuidado posible para no cortarse ni ella ni la tienda, intentó volver a ponerla para dormir, pero se le rompió. En ese momento no sabía qué hacer, pues no tenía nada, confiesa a elperiodic.com. 

Fue entonces cuando Raquel decidió aprovechar la ayuda que los vecinos le estaban prestando. Llamó a una chica de Bilbao que le había ofrecido su hogar como refugio y le explicó que finalmente se quedaría allí ante la mala situación meteorológica. Sorprendida nos cuenta que la bilbaina no espero y "a las dos de la mañana estaba allí a por mi". 

A pesar de estos pequeños esfuerzos y problemas, ha reiterado que no dudaría en volver a hacerlo, aunque ha explicado que  en un futuro se ve trabajando en su web, dando charlas, siguiendo con los cursos y consiguiendo más conferencias. También escribiendo el libro del viaje, el cual ya sería el tercero que publica. Y, sobre todo, ayudando a quien pueda, puesto que es lo que más le gusta, “motivar a la gente para desarrollar su potencial”.

Asimismo, también ha querido mandar un mensaje a todas aquellas personas que están pasando hoy en día por lo que ella pasó en su momento: “Les diría que no están solas. Si algo he aprendido durante estos dos años es que la gente se siente muy sola en su dolor, y parece que somos los únicos que pasamos por ahí. Es necesario ser valiente para pedir ayuda o para decir que no estás bien”.