Infraestructuras paga 31,5 millones a los beneficiarios de ayudas a la vivienda
El Consell ha ejecutado el pago de 31,5 millones de euros en ayudas a la vivienda correspondientes a 7.687 expedientes cuyos beneficiarios recibieron el ingreso de la cantidad adeudada en su cuenta bancaria el 30 de diciembre de 2014.
Tal y como los consellers de Infraestructuras, Isabel Bonig, y de Hacienda, Juan Carlos Moragues, se comprometieron el pasado mes de septiembre cuando se anunció que se generaría un crédito extraordinario de 144 millones de euros para el pago de la deuda. Ambos consellers aseguraron que, en el último trimestre del ya pasado año, se abonarían 40 millones de euros de este crédito. A 30 de diciembre de 2014 la Intervención General de la Generalitat ha certificado el abono en cuenta bancaria de 31.520.249,46 €, correspondientes a 7687 expedientes. Los otros 8,5 millones de euros restantes se abonarán entre hoy viernes y el lunes ya que el 30 de diciembre es el último día hábil en la Administración Valenciana.
A esta cantidad hay que sumar que la Dirección General de Obras Públicas y Vivienda de la conselleria ya tiene en sus últimas fases de acreditación otros 3.368 expedientes por valor de 20.775.839 euros con lo que el volumen de deuda que se podrá saldar en las próximas semanas será de 52.296.088'84 euros correspondientes a 11.055 expedientes.
Según la titular la conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente (CITMA), Isabel Bonig, "estamos muy satisfechos porque, tal y como dijimos el conseller Moragues y yo, hemos cumplido el compromiso asumido el pasado mes de septiembre que establecía que pagaríamos 40 millones de euros este año y así ha sido porque, aunque se han abonado en las cuentas bancarias de los afectados 31'5 millones. Los otros 8'5 que faltan se pagarán en los próximos días en cuanto pasen las fiestas de Fin de Año".
Para la consellera, "estos pagos continuarán el año que viene porque tenemos líneas de crédito presupuestadas y queremos consensuar con los afectados un calendario de abonos". Para 2015 se prevé que se puedan pagar otros 121 millones de euros. Además, la consellera ha recordado que, "gracias a las gestiones realizadas durante los últimos dos años, la deuda es imprescriptible y, por tanto, los afectados la cobrarán a pesar de aquellos que se han dedicado a intoxicar, manipular y utilizar torticeramente un problema para sacar réditos electorales".
El proceso burocrático para abonar las ayudas es de los más complejos que existen en la Administración valenciana.
Cada uno de los 50.000 expedientes que están pendientes debe seguir los siguientes pasos:
1. Consulta para comprobar que los particulares están al día con las obligaciones fiscales, tributarias y con la Seguridad Social. Si tienen alguna deuda con alguna de estas entidades deben saldarla y certificar el pago.
2. Se solicita a los beneficiarios sus datos bancarios, una declaración que autoriza a la conselleria a consultar sus datos fiscales y un escrito en el que declara no estar incuro en en ninguna de las prohibiciones que dice la Ley de Subvenciones para percibir ayudas.
3. Esta documentación se manda al Servicio Central de Ayudas a la Vivienda de la conselleria que incluye a los beneficiarios en un fichero informático por cada expediente. A continuación, la Intervención da de alta a los afectados como receptores de fondos de la Generalitat.
4. La misma información se remite a la conselleria de Hacienda que coteja que cada número de cuenta se corresponde con ese DNI, nombre y entidad financiera. Si algún dato es incorrecto no se incluirá en la lista provisional.
5. La conselleria de Infraestructuras elabora la lista definitiva de beneficiarios con los datos ya cotejados por Hacienda. Estas listas se elaboran por orden de antigüedad ya que las ayudas se pagan por bloques de varias decenas de expedientes.
6. La lista se remite a los servicios territoriales de Vivienda que certifican que los solicitantes están al corriente y pueden percibir la subvención correspondiente. El servicio territorial firma ese certificado y lo vuelve a remitir a la central de la conselleria.
7. Con ese certificado, se cierra el paquete completo. Se incorpora la documentación y la resolución de la ayuda.
8. A continuación, se prepara una propuesta de libramiento (que es un documento de pago) para que sea firmado por la Dirección General de Vivienda. Una vez firmado el documento, se adjunta a todo el expediente de los particulares que forman ese paquete de ayudas.
9. Se manda al Servicio Presupuestario de la conselleria de Infraestructuras. Este servicio elabora el documento contable con toda la información necesaria (importes a pagar, la aplicación presupuestaria correspondiente, línea de presupuestos, dirección general…). Y todo eso se envía a la Intervención.
10. La Intervención revisa y comprueba toda la documentación, según marca la legislación vigente. Si no está correcto, se devuelve a la Dirección General de Vivienda para que el error sea subsanado.
11. Si todo es correcto, se aprueba el pago y se contabiliza de conformidad. Se remite a la Tesorería de la conselleria de Hacienda y Administración Pública que, al final de mes, ordena el pago y se lleva a cabo la transferencia.
Dada la complejidad de los trámites que establece la ley para realizar el pago de las ayudas, la consellera Bonig ha agradecido el trabajo realizado en las últimas semanas para llevar cabo el abono de la deuda. "Quiero agradecer a los funcionarios de la Subdirección General de Proyectos Urbanos y Vivienda el enorme trabajo que han realizado para resolver miles de casos cuya tramitación era especialmente compleja pues cada expediente tiene que cumplir once pasos administrativos. Los funcionarios no han escatimado horas ni dedicación para conseguir cumplir el plazo comprometido.
El pago de la deuda a los beneficiarios de ayudas a la vivienda es una de las prioridades del Consell. Por ello, durante los últimos años se ha realizado una importante labor política y administrativa para solucionar el problema. Cabe recordar que, antes del año 2011, las ayudas a la vivienda no tenían una consignación presupuestaria concreta, es decir, se concedían a todo aquel que cumplía determinados requisitos y, si se habían agotado los fondos, se pasaba el pago a los ejercicios siguientes. Con la crisis económica y la caída de los ingresos en la Administración, los fondos disponibles cayeron en picado y, en pocos años, el volumen de la deuda creció hasta el nivel actual.
Para solucionar esta situación, la Generalitat ha llevado a cabo varias medidas entre las que cabe destacar:
1. Pago de anticipos: Durante los ejercicios de 2013 y 2014 se tramitaron los expedientes de beneficiarios que se habían acogido a anticipos bancarios al amparo de los correspondientes convenios de colaboración suscritos por la Generalitat con entidades financieras (los bancos adelantaban el monto de la ayuda pero, como la Generalitat no pagaba, terminó por reclamarlo a los compradores). De esta forma, durante el año 2013, se pagaron 8'4 millones de euros a 1.084 beneficiarios y en el 2014 se abonaron 397.000 euros a 32 beneficiarios. Se evitó así que se produjeran ejecuciones hipotecarias por impago.
2. Orden 12/2013 de la Citma que estableció que las personas en situación de especial vulnerabilidad tendrían prioridad en la concesión de ayudas. Bajo el mandato de esta orden se abonaron 497.664 euros a 61 beneficiarios en 2013 y 500.852 euros a otros 72 en 2014 de forma que las situaciones más graves (con riesgo de desahucio) se solucionaron.
3. Reconocimiento de la deuda: en marzo de 2014, el Consell decidió incluir toda la deuda de las ayudas a la vivienda (240 millones) como déficit de la Generalitat. Para que una comunidad autónoma pueda aumentar su déficit, debe estar autorizado tanto por el Gobierno Central como por Eurostat, la oficina estadística de la Comisión Europea, quien autorizó la medida. Con esta acción, la deuda de la Generalitat con los afectados se convirtió en imprescriptible.
4. Inclusió de la deuda en un texto legislativo: En junio de 2014 se aprobó la Ley de Puertos de la Comunitat Valenciana. En una disposición transitoria de la norma se incluyó el reconocimiento de deuda para ofrecer a los afectados la máxima garantía legal para su cobro.
5. Pagos conforme a la disponibilidad presupuestaria: Durante el periodo 2013-2014 se han pagado 22 millones de euros conforme se liberaban algunas partidas del presupuesto.
6. Partidas extraordinarias para el pago: En septiembre de 2014 se anunció, por parte de los consellers de Hacienda y de Infraestructuras, la inclusión de una partida extraordinaria de 40 millones de euros que son los que se han pagado ahora.
7. Crédito extraordinario: En los Presupuestos de la Generalitat para el año 2015 se ha incluido un crédito extraordinario de 121 millones de euros destinados al pago de la deuda conforme a un calendario de pagos que se pretende consensuar con los afectados.
La Generalitat adeuda a los beneficiarios de ayudas a la vivienda un total de 240 millones de euros correspondientes a subvenciones concedidas desde el año 2009. La deuda afecta a personas físicas, pero también a constructoras, promotoras y ayuntamientos. La deuda a particulares se cifra en 170 millones mientras que el resto se reparte entre ayuntamientos (5'2 millones), promotores (21'8 millones) y comunidades de propietarios (44 millones de euros). De los 50.000 expedientes que, a mediados de 2014, estaban por resolver, a 30 de diciembre de 2014 esta cifra se ha reducido a 39.000.
