200 religiosas de vida contemplativa visitan el Monasterio de Godella, en el que se instalarán 50 de ellas
El pasado sábado, 200 religiosas de vida contemplativa de la congregación Iesu Communio visitaron el monasterio de Godella en el que establecerán su primera comunidad con 50 hermanas fuera de la diócesis de Burgos, de donde provienen.
Las religiosas llegaron a Godella en cuatro autobuses. Tras rezar y recorrer las instalaciones, la superiora de la Comunidad, la madre Verónica Berzosa, presentó el monasterio que ahora será reacondicionado durante varios meses, entre otras cosas, para aumentar el número de celdas, dado que la comunidad que se instalará será de 50 religiosas, todas ellas profesas.
«Estábamos desde el año 2000 buscando un lugar y casi habíamos desistido cuando de pronto el cardenal Cañizares nos dijo que viniéramos y que viéramos este monasterio. Lo consulté a la comunidad y todas dijeron que sí, lo cual es muy importante», indicó la madre Verónica. «Mis hermanas están radiantes, están contentas. Valencia se ha volcado, parece una diócesis que nos haya estado esperando», añadió.
Después de visitar el monasterio, toda la comunidad de religiosas acudió a la Catedral de Valencia donde participó en la misa de acción de gracias con motivo de su acogida en la diócesis, que presidió el cardenal Cañizares.
Finalmente, a última hora de la tarde emprendieron viaje de regreso con autobús al monasterio de La Aguilera (Burgos) al que llegaron a las 3 de esta madrugada, según han indicado fuentes de Iesu Communio.
