La Generalitat reconoce el temor a una cuarta ola por la cepa británica

El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha reconocido este lunes abiertamente la preocupación existente en estos momentos de una posible cuarta ola por la cepa británica. El president, a preguntas de los periodistas, ha dicho que la previsión es relajar las medidas los próximos días pero “hay que ser muy prudentes”. Esto afectaría, sin duda, a las vacaciones de Semana Santa en las próximas semanas.

Y esta prudencia, explica Puig, viene porque “tenemos una cuarta ola que no sabemos si se producirá o no pero hay muchas circunstancias que no conocemos”. Se refiere el president a la propagación de la variante británica “que podría complicarnos la salida de la pandemia”.

Es por ello que el president ha anunciado que va a hablar con los presidentes autonómicos y el gobierno central sobre la movilidad entre comunidades para pedir que no se relajen excesivamente los confinamientos perimetrales: “No hay que facilitar excesivamente la movilidad hasta que no tengamos garantías de una superación de la pandemia”, ha concluido el president.

Tal y como les ha contado elperiodic.com, el presidente de la Generalitat Valenciana ha anunciado una "flexibilización prudente" de las restricciones a partir del 2 de marzo en la Comunitat Valenciana si los datos de contagios, hospitalizados y fallecidos siguen descendiendo.

En las últimas semanas, la Comunitat ha reducido en más de 1.000 la incidencia, que ahora se sitúa en poco menos de 300. "El objetivo es llegar a 50, por lo tanto no podemos lanzar las campanas al vuelo" y seguir avanzando en la vacunación.

Asimismo Puig ha señalado que aunque no hay ninguna decisión tomada, la apertura de las terrazas podría entrar dentro de los planes para la flexibilización.