La Generalitat recomienda a los consumidores la máxima responsabilidad en la adquisición y uso de los artículos de disfraz

La Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo ofrece a los consumidores de la Comunitat Valenciana las recomendaciones que deben seguir a la hora de adquirir y utilizar disfraces con motivo de la celebración de Carnaval, especialmente cuando estén destinados al público infantil.

La directora general de Comercio y Consumo, Silvia Ordiñaga, ha señalado que “es fundamental que los consumidores y usuarios sean responsables a la hora de adquirir estos productos, extremen las precauciones y no se dejen llevar sólo por el precio reducido de éstos, ya que es la mejor manera de que los productos irregulares no tengan cabida en el mercado”.

“Además, -ha señalado- es imprescindible no olvidar solicitar el tíquet de compra, ya que esta es la garantía de la trazabilidad del producto”.

Ordiñaga ha destacado la importancia de “extremar las precauciones en el caso de elementos destinados a su uso por parte de los niños, ya que se trata de un colectivo de especial protección”.

En este sentido, ha recordado que “los disfraces para niños menores de 14 años se consideran juguetes, por lo que en el etiquetado deben incluir, en alguna de las lenguas oficiales de la Comunitat, el nombre y marca del producto, los datos de identificación del fabricante, importador o distribuidor, las instrucciones y advertencias de uso y la marca CE”.

Cabe señalar que la Generalitat trabaja conjuntamente con las asociaciones de consumidores y las oficinas OMIC de los ayuntamientos con el fin de detectar este tipo de irregularidades, con el fin de lograr una mayor efectividad en la defensa de los intereses y derechos de los consumidores.

Recomendaciones
En el etiquetado de los disfraces y complementos deberá figurar el domicilio del fabricante y el número de registro industrial (en los productos nacionales) y el domicilio y número de identificación fiscal del importador (para los productos importados). Además, deberá contener las instrucciones de uso, seguridad y mantenimiento en una lengua oficial del estado español.

En este sentido, aquellos complementos cuyo uso pueda suponer un riesgo o que requieran precauciones en su manejo, deberán llevar las correspondientes indicaciones en el embalaje o en el propio producto. Además, los disfraces que van dirigidos a los niños, y por tanto se consideran juguetes, debe llevar el marcado CE.

En el caso de las máscaras deberá comprobarse que tienen orificios suficientemente grandes, de un mínimo de 1.300 mm2, que permitan la ventilación para evitar un posible riesgo de asfixia. También se recomienda prescindir de todos aquellos accesorios o complementos de los disfraces, como clavos, tridentes, etc., que tengan salientes punzantes o puntiagudos por el posible riesgo de heridas y cortes.

Asimismo, es recomendable elegir pelucas y disfraces de materiales de baja inflamabilidad por el posible riesgo de quemaduras.

Desde la Dirección General de Comercio y Consumo se recomienda extremar la precaución en los disfraces para menores de 36 meses en los que deberemos evitar todos aquellos que lleven piezas pequeñas que puedan desprenderse con el consiguiente peligro de asfixia.

Además, es importante prestar atención a aquellos artículos de broma que puedan producir descargas eléctricas ya que pueden suponer un riesgo para niños menores de 14 años, ancianos y personas con afecciones cardiacas o que tengan implantado un marcapasos, así como aquellos en los que se emplean sustancias que pueden resultar tóxicas.