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La Generalitat y la FVMP reiterarán al Gobierno central reunirse antes del 16 de octubre para salvar los chiringuitos

La Generalitat y la FVMP reiterarán al Gobierno central reunirse antes del 16 de octubre para salvar los chiringuitos
  • Los 60 municipios con litoral han mostrado su completo apoyo a la Generalitat

  • Los Consellers esperan que el Gobierno Central les reciba y puedan llegar a un acuerdo antes del 16 de octubre, fecha de inicio de derrocamientos

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La Generalitat ha recabado el apoyo de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) para reiterarle, hoy mismo por vía de urgencia, al Gobierno central la petición de reunirse antes del 16 de octubre, fecha en la que 15 locales de la playa de la Malvarrosa deberán realizar obras para acoplarse a la Ley de Costas.

Así lo han expresado esta mañana el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, y la consellera de Turisme, Belén Juste, en rueda de prensa tras reunirse con la Comisión de Turismo de la FVMP, presidida por la presidenta de la FVMP, Elena Bastidas.

Castellano ha recordado que la Generalitat ya cuenta con el apoyo de la Comisión de Urbanismo y de los hosteleros, además del de la Comisión de Turismo de la FVMP para intentar salvar los chiringuitos de toda la Comunitat Valenciana.

“Hace dos semanas nos reunimos con la Confederación Empresarial de Hostelería de Valencia (CONHOSTUR) y hoy lo hemos hecho con los 60 ayuntamientos con litoral de la Comunitat, que también nos han manifestado su respaldo a la Generalitat para reunirnos con el Gobierno y poder alcanzar un acuerdo consensuado para un sector que representa el 13 por ciento del PIB y que genera 5.000 empleos directos”, ha afirmado Castellano.

El conseller de Gobernación, que ha tildado la reunión de “tremendamente positiva”, ha matizado que la Generalitat “va a mantener todas y cada una de las peticiones que ha hecho al Gobierno, como es aplicar una moratoria hasta que se solvente el problema para todos los establecimientos de la Comunitat, el traspaso de competencias e incluso modificar y clarificar la Ley porque así se lo han manifestado todos los apoyos”.

Igualdad para las CCAA
Los consellers exigen igualdad por parte del Gobierno Central y critican la falta de sensibilidad, de diálogo y de consenso en llegar a un acuerdo con la Generalitat.

“No vamos a bajar la guardia ni a rebajar ninguna de las peticiones realizadas, lo que queremos es desde la lealtad, el diálogo y el consenso institucional llegar a un acuerdo para todos los establecimientos de la Comunitat y que no se vea perjudicado ni nuestro turismo, ni nuestro sector servicios, ni el empleo”, ha puntualizado Castellano.

Además, ha añadido que lucharán porque “no se entiende que el Gobierno de España intente negociar local a local y playa a playa y que en otras comunidades las mismas políticas se apliquen de una manera más flexible y en la Comunitat Valenciana de una forma más estricta”.

Preguntado por qué pasaría en el caso de que el Gobierno no les reciba, ha matizado que “la Generalitat lo que quiere es llegar a un acuerdo y no queremos pensar en que no se haga una reunión entre dos gobiernos para llegar a un acuerdo de una cuestión política, que requiere una solución política, pero no descartamos medidas jurídicas y otras legales”.

Por su parte, la titular de Turisme ha mostrado su indignación por la falta de respuesta y toma de decisiones en este tema del Gobierno Central, “no se puede entender que Zapatero opte por medidas que perjudiquen muchísimo al sector turístico de la Comunitat Valenciana, como es, la demolición de los chiringuitos”.

“Poniéndonos en el peor de los escenarios- ha avanzado Juste- nos sentaremos antes del día 18 en el Ministerio para que nos reciban”. Para la Consellera “habrá algún encuentro seguro, puesto que si no nos contestan ellos, iremos nosotros en busca de una solución”.

Por último, Juste ha lamentado el caso de la Malvarrosa, “no se puede romper el acuerdo de una moratoria, quedaban dos años de tranquilidad para poder negociar y ésta última decisión ha perjudicado no sólo los locales de esta zona, sino a otros como Pinedo, donde la incertidumbre y el miedo a ser demolidos perjudica su día a día”.

 

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