García Antón lamenta que la Valenciana sea la única comunidad que el Gobierno condena a la desalación
En la clausura de la Jornada técnica sobre Eficiencia Energética organizada por la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana
El conseller denuncia "la marginación a la que Zapatero somete a la Comunitat"
García Antón muestra su indignación y considera que para el Gobierno los valencianos son ciudadanos de segunda
Para García Antón resulta “indignante comprobar que en otras Comunidades Autónomas si que se ponen en marcha actuaciones que se encontraban incluidas en el Plan Hidrológico Nacional, mientras que en la Comunitat Valenciana se nos condena a la desalación”. “Con esta actitud se pone de manifiesto, sin lugar a duda, que para el Gobierno Central los valencianos somos ciudadanos de segunda”.
Tal y como ha recordado el conseller durante esta semana se inauguraba los primeros cinco kilómetros del canal Segarra-Garrigues, una infraestructura que cuando acabe dará servicio a 16.000 regantes catalanes y que permitirá aumentar la producción agraria de varias comarcas de Lérida y que supone en palabras de su Presidente “el emblema del proceso de transformación más grande que se hace hoy en Europa”. Igualmente en Aragón se están desarrollando actuaciones previstas en el PHN.
“Sin embargo, a nosotros, ha manifestado García Antón, lo único que nos quedan son las desaladoras como la que hoy se inicia en Oropesa y con la que queda claro que no ha de traer agua del Ebro ya que según han expresado desde el Ministerio de Medio Ambiente esta infraestructura que generará en su primera fase 21,5 hectómetros cúbicos solucionará gran parte de los problemas hídricos de la provincia”.
“No se puede tolerar”
“Sinceramente, ha continuado el conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, no podemos tolerar esta desfachatez. Nos quitan el trasvase del Tajo-Segura, modifican los caudales del Júcar-Vinalopó unilateralmente con la consecuencia de que cada vez llega menos agua y de peor calidad a nuestra Comunitat lo que resulta nefasto para nuestros agricultores”.
“Y es que, además la desalación que para la Comunitat Valenciana parece ser la única solución planteada desde el Ministerio de Medio Ambiente supone un despilfarro energético totalmente contrario a nuestras acciones para combatir el cambio climático y aumenta considerablemente el precio del agua”.
“Si continuamos así, ha explicado el conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, va a llegar un momento en que nuestros regantes paguen 1 euro por metro cúbico de agua lo que acabaría con nuestra agricultura”.
“Es evidente que hay dos formas de potenciar la agricultura en España, una para las Comunidades afines, a las que se premia con grandes actuaciones que palian su situación y otra al resto, entre las que nos encontramos nosotros que, a pesar de padecer una enorme escasez hídrica se nos condena a la desalación. Es totalmente incomprensible”, ha concluido García Antón.
