Francesc Signes exige a Alberto Fabra que dé la cara y explique la paralización del Corredor Mediterráneo
El secretario de Infraestructuras y Sostenibilidad del PSPV-PSOE, Francesc Signes, ha exigido hoy al president de la Generalitat, Alberto Fabra, que “dé la cara, rompa su mutismo y explique a los valencianos la paralización del Corredor Mediterráneo mientras se da prioridad a los Ejes Atlántico-Mediterráneo y Central, así como a las redes del AVE convencional”. El diputado socialista ha lamentado que “el cambiazo” del gobierno de Rajoy hace imposible que el Corredor Mediterráneo llegue a Valencia en 2015 y a Alicante en 2016 y, por tanto, ha advertido de que “se corre el riesgo de que se retrasarse más allá de 2020 y de que no se pueda optar a los fondos europeos ‘Conectar Europa’”.
Para Signes, “esto pone en evidencia las promesas de Fabra y Bonig en Les Corts Valencianes” y ha añadido que esta situación “no solo supone un importante encarecimiento de los precios de transporte sino que solo mejorará un 3,8% las exportaciones valencianas”. Además, ha apuntado que también “pone en riesgo el liderazgo del Puerto de Valencia respecto a las exportaciones asiáticas y potencia la situación de los puertos de Barcelona y Algeciras, así como del puerto de Tánger, para aquellas exportaciones que tengan como destino el puerto de Roterdam”. Por otra parte, también ha criticado que el tercer carril “no solo está paralizado en el tramo frontera francesa-Alicante sino que acumula ya un año de retraso respecto a lo anunciado por Ana Pastor en el tramo Alicante-Murica-Cartagena” y lo mismo sucede en los trenes de cercanías entre Murcia y Alicante.
Ante esto, el responsable socialista ha criticado que “con todas estas actuaciones lo que está haciendo el gobierno de Rajoy es asestar un golpe de muerte a la economía valenciana con la complicidad del Consell”. Por ello, ha pedido la comparecencia inmediata de Bonig en Les Corts para que dé las explicaciones oportunas en sede parlamentaria. Por último, ha lamentado que esta situación es “fruto de un presidente y un Consell que vive sus últimas horas y solo se preocupa de la candidatura de Fabra de cara a las próximas elecciones”.
