El economista Celestí Gimeno afirma que "partimos de unas pensiones que dan risa, son catastróficas, de las más bajas de Europa”
El economista Celestí Gimeno i Broch ha relacionado en su conferencia la temática del curso de verano de la Universitat Jaume I “Cambio y desarrollo en un mundo que envejece” con la difusión del primer estudio del Gobierno español sobre las balanzas fiscales para apostar por un “sistema fiscal federal” con un doble objetivo: paliar lo que ha calificado de “expolio” de España hacia la Comunitat Valenciana y afrontar mejor el creciente gasto sanitario y social que genera el progresivo envejecimiento de la población valenciana, que “obliga a abordar el problema de la financiación de las pensiones”.
El profesor del Departamento de Economía de la UJI ha realizado estas reflexiones durante la primera jornada del citado curso de verano, que hasta el próximo viernes 18 analiza en el hotel Orange de Benicàssim la “gran revolución gris” que experimentan las economías desarrolladas debido al progresivo incremento de la esperanza de vida. Gimeno i Broch, miembro del Instituto Interuniversitario de Desarrollo Local y experto en balanzas fiscales, ha iniciado su conferencia mostrando pirámides de edad de España desde 1900 a 2001 tras lanzar la pregunta-guía “¿hay suficiente dinero para pagar las pensiones?”. “Es evidente que cada vez hay más gente mayor de 65 años y menos cotizantes a la Seguridad Social, con lo que esta pregunta, que hace 30 años no tenía sentido, ahora es de máxima actualidad. Es un problema del mundo desarrollado pero lo más grave es que partimos de unas pensiones que dan risa, son catastróficas, de las más bajas de Europa”.
Este nuevo fenómeno por el que se incrementa la expectativa de vida y desciende la natalidad, conocido como “terremoto demográfico” o “involución demográfica”, se acentuará en las próximas décadas, según ha explicado. En 2004 había 457 millones de personas trabajando en la Unión Europea, mientras que las previsiones más optimistas apuntan a que en 2050 serán 454 millones, “y las proyecciones más realistas apuntan a 40 millones menos de trabajadores”.
Gimeno i Broch también ha mostrado con tablas que la inmigración ha generado un repunte de la tasa de natalidad en lo que va de siglo en España y que la Comunitat Valenciana está en el noveno puesto en el ranking de hijos por mujer, con 1,39, “por debajo de la tasa de reemplazo”. “La inmigración puede ser la solución al problema demográfico”, ha asegurado el profesor de la UJI, “aunque las tasas de fecundidad de las mujeres inmigrantes también van descendiendo conforme se integran en las sociedades de acogida y adoptan sus mismas pautas de comportamiento”.
Si este dato se combina con el hecho de que España ocupa la posición número cinco en el ranking mundial de esperanza de vida de la OCDE o el creciente agrupamiento familiar de los inmigrantes, “y además coincide que arrastramos una de las productividades económicas más bajas del mundo desarrollado, la conclusión es que tenemos que hacer algo para no sufrir graves problemas con el mantenimiento de las pensiones”, ha añadido.
“De hecho, según las previsiones de la UE, en el año 2050 una cuarta parte de la población tendrá más de 85 años, como ya está ocurriendo en provincias españolas como Teruel”. Las principales consecuencias serán el incremento del gasto sanitario (principalmente el farmacéutico) y de las pensiones. “¿Habrá suficiente dinero? ¿Se podrá mantener el sistema de pensiones?”, se ha cuestionado Celestí Gimeno.
“El Estado vampiriza a la Comunitat”
En este punto, el economista de la UJI se ha referido a la primera publicación de las balanzas fiscales entre Comunidades Autónomas por parte del Gobierno central. “La Comunitat Valenciana es la autonomía que menos gasta en sanidad de toda España, con una de las tasas más bajas de camas hospitalarias de todo el país y la tercera que menos gasta en asistencia a domicilio. Hoy se ha demostrado que es un atraco, que nos están vampirizando: 600.000 millones de euros se van a Madrid cada año y no vuelven. En nombre de la solidaridad interterritorial, hay que exigir que se devuelva el dinero a los valencianos para cubrir primero nuestras necesidades”, ha afirmado Gimeno i Broch, autor del libro ‘L’espoli fiscal del País Valencià’, para finalmente abogar por “instaurar un sistema fiscal federal para solucionar el déficit fiscal y los problemas derivados del envejecimiento poblacional”.
