Dénia se convierte en un referente del Día Internacional de las Montañas

El Día Internacional de las Montañas se celebra a nivel mundial el 11 de diciembre. La ciudad de Dénia, a través de la Agenda 21 Local, participa en esta celebración que impulsa la ONU desde el año 2009 organizando diversas actividades en torno a las montañas en general y al Montgó en particular. El proyecto surgido desde el ayuntamiento dianense ha ido creciendo e incorporando a más administraciones públicas, como la Generalitat Valenciana o la Diputación de Barcelona, asociaciones y federaciones y a miles de particulares amantes de las montañas.

En este marco, Dénia creó hace unos años un proyecto de comunicación que se articula desde las redes sociales conocido como Welovemountains que le valió su nombramiento como miembro de pleno derecho de la Alianza para las Montañas de las Naciones Unidas en 2013. Y este año se ha dado un paso más, ya que la FAO y su Alianza para las Montañas han decidido incorporar el hashtag #welovemountains como centro del mensaje mundial del DIM 2014.

Este hecho ha sido destacado por el concejal de la Agenda 21 Local, Vicente Chelet, en el acto institucional de conmemoración del Día Internacional de las Montañas celebrado hoy en el Ajuntament de Dénia en el que han intervenido también la alcaldesa de la ciudad, Ana Kringe; la directora general del Medio Natural, Salomé Pradas; el vicepresidente de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada y presidente de la federación en la Comunitat Valenciana, Francisco Durá; y la representante del Área de Información y Comunicación del Partenariado de la Montañas de la FAO, Sara Manuelli, que ha participado en el acto desde Roma a través de una videoconferencia.

Chelet ha remarcado que el proyecto Welovemountains “comienza a darnos visibilidad y nos va a permitir articular nuevos proyectos turísticos clave para nuestro territorio”.

El concejal ha hecho un repaso de los principales hitos de la plataforma Welovemountains y el movimiento mountainlovers a través de algunas de las personas que han participado en él, como Juanito Oiarzábal, Joaquín Araujo, Mario Roig, José Manuel Almenar, César Pérez de Tudela, el escritor Chris Stewart o el niño Dani Masanet, que consiguió hacer realidad su sueño de llegar hasta la cima del Montgó gracias a la ayuda de estos amantes de las montañas.

Por último Chelet, parafraseando al alpinista César Pérez de Tudela cuando afirmó en la conferencia que ofreció en Dénia el pasado 6 de diciembre que sube montañas “no por una obsesión”, sino porque tiene “una misión”, ha indicado que “nosotros también tenemos una desde aquí: compartir y ser solidarios, buscar consenso e intentar la reconciliación, buscar retos que sean objetivos comunes y juntos alcanzar la cumbre”.

La directora general del Medio Natural, por su parte, se ha referido a la “apuesta clara de la Generalitat Valenciana por todo lo que implica el Día Internacional de las Montañas, intentando que la sociedad civil se impregne de los valores que postula la celebración ”.

En este sentido, se han organizado actividades en doce de los veintidós parques naturales de la Comunitat, con la participación de más de 800 personas. Salomé Pradas ha felicitado al Ajuntament de Dénia por su “encomiable labor de divulgación y protección del medio ambiente”, lo que lo convierte en un ayuntamiento “ejemplar”.

La representante de la FAO ha resaltado “el gran compromiso del Ajuntament de Dénia a favor de las montañas del mundo”, agradeciendo su contribución a la protección y cuidado de las montañas y sus pobladores. Esta tarea ha sido destacada también por el vicepresidente de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada, Francisco Durá, quien ha solicitado la implicación de “la sociedad civil, las administraciones, los municipios y los deportistas para seguir disfrutando de las montañas con libertad”.

Durá ha sido el encargado de leer la declaración institucional del DIM 2014 con la que se ha puesto punto y final al acto. El texto de la declaración es el siguiente:

“En un mundo enfermo como en el que nos toca vivir en estos momentos, las montañas son por lo menos dos veces antídoto. En primer lugar porque en ellas se esconde la mayor parte de los bosques, sobre todo en las zonas templadas y frías del planeta y, por otro, porque son los últimos territorios donde el ser humano puede encontrarse con las últimas manifestaciones de la belleza en libertad. Son farmacias, por tanto, para el corazón, para el alma humana, pero no menos para el medio ambiente, porque de las montañas mana la transparencia de los aires, la limpidez de las aguas y la multiplicidad de lo vivaz. Son una tabla de náufrago para este mundo.”