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Cullera controla la plaga del picudo rojo

Cullera controla la plaga del picudo rojo
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    Cullera controla la plaga del picudo rojo - (foto 2)

    Los técnicos de la concejalía de Servicios Exteriores del Ayuntamiento de Cullera han conseguido durante los últimos meses controlar la plaga del picudo rojo que afecta las palmeras.

    La evolución a lo largo de este año de la incidencia del insecto en la localidad ha sido muy positiva, puesto que no se ha tenido que talar ningún ejemplar, una cifra que contrasta con las 100 que se cortaron el año pasado.

    Cullera cuenta en la actualidad con unas 3.000 palmeras, la mayoría de ellas datileras, mientras que las canadienses y Washingtonia tienen una presencia meramente testimonial. De todas ellas, únicamente dos han muerto últimamente, pero su delicada situación venía de largo.

    La concejalía de Servicios Exteriores optó hace ocho meses para pulverizar las palmeras en lugar de realizar inyecciones, una técnica que de momento ha dado buenos resultados.

    El tratamiento ha sido intensivo y prácticamente continuo. Los técnicos responsables explican que desde diciembre hasta febrero se ha usado Tiametoxam y en el siguiente periodo de marzo hasta abril se ha aplicado Clorpirifos. De mayo a agosto, Midacloprid y, finalmente, de septiembre a noviembre Clorpirifos.

    La aplicación del producto se realiza en las canarias y datileras sobre el cogollo y parte superior del tronco, con un gasto de 20 litros aproximadamente por palmera.

    Los técnicos no optan durante los meses de verano por la retirada de los dátiles, puesto que esta práctica atrae más al picudo por lo que puede resultar contraproducente.

    Por otro lado, se están aplicando tratamientos para la procesionaria del pino que, de momento, están dando un buen resultado.

    El regidor de Servicios Exteriores, Salva Tortajada, se ha mostrado satisfecho por los resultados obtenidos y ha destacado el esfuerzo del consistorio durante los últimos tiempos para mantener en las mejores condiciones todo el palmeral de Cullera, que es uno de los símbolos de la ciudad.

    Asimismo, Tortajada ha avanzado que durante las próximas semanas se hará un estudio exhaustivo sobre el estado actual de las palmeras por parte de especialistas externos, especialmente en parques y jardines donde hay mayor afluencia de gente, para evitar posibles caídas y situaciones peligrosas.

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