El Consell despliega una respuesta histórica e integral frente a la DANA: medidas Conselleria a Conselleria

La Comunitat Valenciana ha enfrentado desde el trágico día del 29 de octubre una de las situaciones más devastadoras de los últimos años con la llegada de la DANA y la riada que ha causado graves daños en viviendas, infraestructuras y servicios básicos, afectando a miles de familias. Un mes después, los valencianos hacen balance de cómo ha evolucionado la situación 30 días más tarde del día D en el que todo cambió.

En respuesta, el Consell, liderado por la Generalitat Valenciana, ha comenzado a implantar un plan de acción coordinado y sin precedentes, destacando su capacidad para gestionar crisis de forma integral y transversal por todos los departamentos del Gobierno valenciano, que también ha sufrido su reestructuración para encabezar esta nueva etapa.

Desde medidas inmediatas para la atención a los afectados hasta estrategias de reconstrucción y reactivación económica, el gobierno autonómico ha movilizado todos sus recursos para responder al impacto de esta emergencia.

Enumeramos las principales acciones desplegadas por las distintas consellerias, abarcando desde el apoyo social y sanitario hasta la recuperación del sector agrario y la reactivación de la industria.

Canalizar los ríos de solidaridad y dar respuesta a las urgencias de las familias

Cuando se cumple un mes de la riada, se han resuelto ya 10.073 ayudas por 60 millones de euros. "Solo en el día de hoy se han resuelto 6.385 ayudas por un importe de 38,31 millones de euros", ha adelantado el president Mazón.

La primera prioridad del Consell fue garantizar la seguridad y el bienestar de las personas afectadas. Para ello, se movilizó a más de 20.000 voluntarios a través del Centro de Coordinación del Voluntariado, una iniciativa que contó con la colaboración de la Cruz Roja y la UME. Estos equipos realizaron labores esenciales de limpieza, reconstrucción y distribución de alimentos, logrando gestionar más de 2.500 toneladas de ayuda humanitaria en las primeras semanas tras la catástrofe.

En paralelo, se habilitaron albergues temporales en Burjassot y en el antiguo Hospital La Fe de Valencia, que actualmente ofrecen refugio a más de 140 personas desplazadas. Estas instalaciones no solo proporcionan alojamiento, sino también servicios psicosociales y acceso a recursos básicos, contribuyendo a una recuperación digna para las familias afectadas.

Otro de los grandes logros fue la creación del Almacén de la Solidaridad, que centraliza la gestión logística de la ayuda recibida, facilitando su clasificación y distribución a las zonas más necesitadas.

Apoyo financiero y fiscal para salir del desastre

La Conselleria de Hacienda desempeñó un papel crucial en la recuperación económica de las zonas afectadas. Se aprobaron líneas de financiación por valor de 350 millones de euros a coste cero, destinadas a empresas y autónomos para reponer bienes destruidos, financiar inversiones y garantizar la continuidad de la actividad económica. Estas ayudas, gestionadas a través del Institut Valencià de Finances (IVF) y Afín SGR, ofrecen plazos de amortización de hasta 10 años, con tres de carencia.

En el ámbito fiscal, se implementaron medidas extraordinarias, como deducciones del 100% en el IRPF para los gastos de reparación de viviendas dañadas y bonificaciones en las transmisiones patrimoniales. Asimismo, se habilitó un canal BIZUM solidario que, hasta la fecha, ha recaudado 3,8 millones de euros para apoyar a las personas damnificadas.

Movilización sanitaria para que no falle el servicio en los momentos más importantes

La Conselleria de Sanidad también actuó con rapidez, logrando que 57 centros sanitarios afectados por la DANA fueran rehabilitados total o parcialmente en un tiempo récord. Esto permitió garantizar la continuidad de los servicios básicos de salud en las zonas más perjudicadas.

Por otro lado, la atención psicológica se convirtió en una prioridad. Se establecieron 13 puntos de asistencia psicológica en 11 municipios, y se movilizaron más de 80 profesionales entre psicólogos, psiquiatras y trabajadores sociales. Estas acciones se complementaron con un innovador sistema de inteligencia artificial que permitió contactar con 6.000 pacientes crónicos, priorizando su atención según la gravedad de sus necesidades.

En cuanto a la vacunación, se desplegaron 11 equipos extraordinarios para reforzar las campañas contra la gripe y el COVID en las zonas afectadas, mientras que las farmacias, en colaboración con Cruz Roja, facilitaron la reposición de medicamentos a más de 90.000 pacientes.

Educación: en busca de la continuidad para el alumnado afectado

El impacto de la DANA en el ámbito educativo no fue menor, con numerosos centros dañados y estudiantes desplazados. La Conselleria de Educación implementó un plan integral para garantizar la continuidad de la enseñanza, que incluyó la reubicación de alumnado en instalaciones temporales, ayudas de comedor y transporte escolar.

Además, se adaptaron las modalidades de docencia, combinando clases online y presenciales según las circunstancias de cada zona. Para los estudiantes de 2º de Bachillerato, se establecieron medidas especiales de acceso a la PAU, ofreciendo tres convocatorias en 2025 para asegurar que ningún estudiante quede en desventaja.

Plan de choque para reconstruir carreteras y tranvías y pasos para sacar a la Albufera de la UCI

La Conselleria de Medio Ambiente desplegó un plan de choque para rehabilitar las infraestructuras dañadas. Hasta la fecha, se han restablecido 17 de las 18 carreteras afectadas, mientras que la gestión de residuos permitió retirar más de 250.000 toneladas de materiales acumulados en las zonas más perjudicadas.

Además, se han puesto en marcha 25 rutas de autobús sustitutivas de Metrovalencia, mientras se trabaja a marchas forzadas para que en los próximos días el servicio del metro vuelva a funcionar.

En L’Albufera, la Generalitat ha liderado las labores de limpieza y desobstrucción de acequias, trabajos que en muchas ocasiones recaen sobre la CHJ y que han requerido intervenciones urgentes para evitar daños mayores. Este esfuerzo ha sido acompañado por la implementación de un "gemelo digital" para supervisar la calidad del agua y garantizar la sostenibilidad del ecosistema.

Ayuda al 'SOS' de agricultores y ganaderos

El sector agrícola también recibió un fuerte apoyo. La Conselleria de Agricultura destinó 20 millones de euros a la reparación de caminos rurales y al acceso a explotaciones. Se distribuyeron 52.500 kilos de paja y 486.000 litros de agua para alimentar al ganado afectado, mientras que un equipo de peritos agilizó los pagos de seguros en 50.000 parcelas dañadas.