El Colegio Oficial de Enfermería presenta su análisis del sector de la enfermería

El Colegio de enfermería de Valencia ha estado realizando durante el mes de octubre una encuesta para conocer la realidad laboral de nuestra profesión en la Provincia.

La acogida de los colegiados ha sido excelente, de manera que aunque este tipo de encuestas online no suelen cosechar cuotas elevadas de participación, hemos sido capaces de reunir una muestra de 915 encuestas válidas, lo cual se traduce en un margen de error inferior al 3,5%.

En este artículo vamos a presentar una panorámica general de los principales resultados; un análisis más detallado será publicado en breve.

Panorámica general

La edad media de las enfermeras/os de la provincia es de 44 años, con una antigüedad media desde que obtuvieron el título (ATS, DUE o Grado) de 20,6 años. El 81% son mujeres y el 19%, hombres. En cuanto a la titulación original, el 24% obtuvo originariamente la de ATS (96% convalidado a Diplomado); el 73% la de DUE (6% homologado a Grado); y un todavía pequeño 3%, que sin duda irá creciendo, ha cursado los nuevos estudios del Grado en Enfermería.

En cuanto a la situación referida al empleo, el siguientes gráfico muestra una panorámica general de los 891 profesionales que componen la Población Activa (gráfico 1):

Según lo anterior, en la provincia de Valencia casi la mitad de los profesionales (46%)están en situación de desempleo (15%), precariedad laboral (27%), subempleo (1%) o han tenido que emigrar para encontrar trabajo (3%).

Desempleo

Tendríamos, pues, unas cifras de desempleo real que más que duplican a las que ofrecen las estadísticas de paro registrado (en torno a 900), situación que afectaría en realidad a algo más de 2.000 enfermeras y enfermeros valencianos. Esta cifra (15%) es la que se denomina “paro en un momento dado”, es decir, el número de profesionales que están desempleados en el momento de contestar a la encuesta.

Pero la información que proporciona la encuesta nos permite cálculos más sofisticados para conocer el alcance del preocupante problema del desempleo. Sabemos, por ejemplo, que el personal sin plaza en propiedad o contrato laboral indefinido trabaja como promedio 31,8 semanas, es decir, el 61,2% del año. Más exactamente, 48,0 semanas en el caso de los interinos (92,3% del año) y 29,6 para el resto de las contrataciones temporales (56,9%).

Por tanto, a los 2.073 desempleados “en un momento dado” habría que sumarles el 7,7% de los 1.876 interinos (145) y el 43,1% de los 1.725 eventuales (744), obteniendo así una cifra de 2.962 profesionales que se encontrarán en situación de desempleo “en algún momento del año”: el 22% de la población activa enfermera valenciana.

Contratación laboral

En la tabla pueden verse los diferentes tipos de contrato que se realizan. Las categorías de personal fijo de plantilla (estatutario + funcionario + laboral) suman en torno al 60% de los efectivos, quedando el resto de enfermeras/os en diferentes modalidades de contratación temporal.

Las diferencias más chocantes no las encontramos al analizar el empleo eventual, con valores que oscilan poco (entre el 19% y el 27%), sino entre lo que podríamos considerar empleo estructural, conformado por los grupos de fijos e interinos, que oscilan en conjunto entre el 73% y el 80%. Como se ve perfectamente en el gráfico, los centros de titularidad pública descargan gran parte del empleo estructural en el personal interino, que supone apenas un 2% del empleo estructural en los centros privados, el 7% en los de titularidad mixta, público-privada, y nada menos que el 29% en los de titularidad pública.

Si se supone, como se escucha con frecuencia, que la gestión privada es más eficiente que la pública y los centros de gestión privada acuden en un escaso 5% de los puestos estructurales a la contratación temporal (interinidades), no se entiende que la gestión pública del personal estatutario lo haga en casi una de cada tres contrataciones. Esto demuestra que existe, de manera consciente o inconsciente, una política de la Conselleria de Sanitat tendente a la precarización, no solo del empleo estacional o de cobertura de bajas, sino del propio empleo estructural.

Precariedad

Siendo el desempleo el principal problema que tiene la Profesión Enfermera en estos tiempos, el de la precariedad laboral afecta numéricamente a muchos más efectivos. Extrapolando los datos de la encuesta, entre los profesionales con trabajo durante la semana de referencia solo 6.500 (un 60%) tiene un empleo fijo o plaza en propiedad, lo cual nos deja un saldo de en torno a 3.500 sin empleo fijo. Y tendríamos, además, 300 que están trabajando en España, pero fuera de la provincia de Valencia, más 60 que están trabajando en el extranjero.

En resumen y redondeando: 2.000 desempleados, 150 subempleados, 3.500 sin empleo fijo (el 16% de ellos con reducción de jornada impuesta) y 350 emigrantes, lo cual significa que en torno a 6.000 enfermeras/os valencianas/os están en alguna de las situaciones de precariedad laboral que se producen en el mercado laboral.

El 18% de los desempleados y subempleados en la muestra, unos 400, no han podido acceder todavía a su primer empleo enfermero. De ellos, únicamente la cuarta parte lleva menos de tres meses (coincidiendo con el tiempo que ha transcurrido desde que acabó el curso en junio) buscando empleo; la mitad lleva entre tres y seis meses y un 17% más de un año.

De los 1.600 desempleados restantes, más de la mitad (56%) hace más de 9 meses que no encuentran trabajo. Y el último contrato que tuvieron, para más de un tercio (36%) tuvo una duración inferior a un mes y para casi dos tercios (64%), inferior a tres meses. Solo un 6% pasó a estar desempleado tras una contratación de duración superior al año.

Turnos y jornada laboral

Si excluimos a quienes disponen de flexibilidad y capacidad decisoria para escoger su jornada eb cada momento, únicamente un tercio (33%) de los encuestados tiene un turno de trabajo fijo que no implique trabajar por la noche o en festivos. En el extremo contrario, es muy reducido (3%) el porcentaje de encuestados que trabaja en sistemas de pool, retenes o similar, es decir, que pueden ver cambiados sus turnos en función de las necesidades diarias de sus centros. En definitiva, dos tercios de las enfermeras/os de Valencia carecen de un turno fijo de trabajo, lo que evidentemente supone en buena parte de los casos una seria dificultad o hándicap para conciliar el trabajo y la vida extralaboral.

Motivación

Las tres cuartas partes de los participantes afirman que seguro (47%) o probablemente (26%) volverían a escoger la Profesión de Enfermería; por el contrario, un 14% dicen que seguro (4%) o probablemente (10%) no lo harían: