Cervera: “Necesitamos la implicación de los medios de comunicación para luchar contra la anorexia y bulimia”
El manual reivindica un tratamiento riguroso y sensible de esta enfermedad, que afecta a al 7% de los adolescentes en España
El conseller de Sanitat ha presentado una guía de buenas prácticas sobre trastornos de la conducta alimentaria con AVALCAB
El conseller de Sanitat, Manuel Cervera, ha presentado esta mañana la guía de buenas prácticas sobre trastornos de la conducta alimentaria (TCA), especialmente dirigida a los profesionales de los medios de comunicación, elaborada en colaboración con la Asociación Valenciana contra la Anorexia y Bulimia (AVALCAB).
Tal y como ha explicado Cervera, la guía, que ha contado con las aportaciones de expertos del ámbito periodístico, institucional, universitario y asistencial, nace como “herramienta de ayuda para el profesional de los medios, cuya función social, informativa y educativa es clave a la hora de entender este tipo de enfermedades, ya que son divulgadores de valores, modas y estereotipos de la sociedad actual”.
Los TCA, que afectan a un 7% de los adolescentes en España, presentan una base psicógena en la que confluyen factores personales, familiares y socioculturales, y engloban distintas alteraciones de la conducta: la anorexia y la bulimia nerviosas, y síndromes parciales de la enfermedad denominados trastornos de la conducta alimentaria no especificados. Su aumento en las últimas décadas ha situado los TCA como una de las psicopatologías más prevalentes en mujeres, y su mortalidad a largo plazo en personas hospitalizadas alcanza el 10%.
“Tenemos la convicción de la enorme influencia de los medios como referentes sociales, sobre todo en aquellos casos donde la personalidad no está debidamente asentada”, ha señalado el conseller. “Por eso hemos elaborado esta guía, para contribuir a un tratamiento más adecuado y sensible de estos trastornos, y evitar que se difundan conductas contrarias a la salud”.
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria y sus factores
La anorexia nerviosa es uno de los TCA más detectados. Se inicia típicamente hacia mitad o final de la adolescencia, siendo su mayor prevalencia entre los 14-16 años. Su aparición se caracteriza por el rechazo a mantener el peso corporal en los valores mínimos normales, el miedo intenso a ganar peso, la alteración de la percepción de la silueta corporal y la presencia de amenorrea.
Más allá de ser sólo una alteración del patrón alimentario, se asocian también factores conductuales, componentes emocionales y socioafectivos, y se ve afectada además por las consecuencias somáticas que realimentan el cuadro clínico.
Por otro lado, la bulimia nerviosa es más prevalerte hacia el final de la adolescencia, en torno a los 18-20 años, y se caracteriza por recurrentes episodios de voracidad (atracones); conductas compensatorias inapropiadas con el fin de no ganar peso (ayuno, ejercicio excesivo, conductas purgativas como la autoinducción al vómito o el abuso de laxantes o diuréticos); y una autoevaluación de la paciente exageradamente influida por el peso y la imagen corporal. También en este caso están implicados factores conductuales, motivacionales, emocionales y cognitivos.
“Se trata en definitiva de enfermedades que cursan con graves alteraciones de la conducta, tendentes a la cronicidad y a la aparición de recaídas, que están asociadas a problemas emocionales, de insatisfacción corporal, situaciones familiares sumamente conflictivas e incluso a un alto riesgo de suicidio, ha detallado el conseller, por lo que necesitamos prestarles una atención muy especial”.
Además, presentan una elevada comorbilidad con otro tipo de trastornos como la depresión, la ansiedad o el consumo de sustancias.
Detección precoz y asistencia sanitaria
Otra de las iniciativas de la Conselleria de Sanitat en el ámbito de los TCA es el programa DITCA (Detección e Intervención Precoz de Trastornos de la Conducta Alimentaria), desarrollado en centros educativos de la Comunitat. Gracias a este programa, durante el curso 2007/08 se localizaron 92 casos probables de este tipo de trastornos; casos que se remitieron a las unidades especialidades de la red asistencial para evaluar cada caso. El curso anterior, un total de 127 casos fueron diagnóstico positivo.
Asimismo, las Unidades de trastornos de la alimentación de la Conselleria de Sanitat atienden anualmente a más de 140 pacientes con anorexia y bulimia.
