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El CECOVA pide que la píldora postcoital se dispense en los centros de salud

  • Ávila propone que “se dispense gratuitamente en los centros de salud con el asesoramiento de los profesionales sanitarios especializados con un control y una orientación sobre otros métodos”

  • Apuesta por “más educación afectivo-sexual para prevenir los embarazos y enfermedades de transmisión sexual”

El Consejo de Enfermería de la Comunitat Valenciana (CECOVA) alertó hoy que la venta en farmacias sin receta ni límite de edad de la píldora postcoital anunciada por el Ministerio de Sanidad y Política Social “puede acarrear que este medicamento se convierta en el método anticonceptivo de moda entre los jóvenes y dejen de lado otros métodos más seguros como el preservativo que además protege de enfermedades de transmisión sexual”.

Por ello, el presidente del CECOVA, José Antonio Ávila, advirtió sobre “el riesgo real de que la comodidad y la accesibilidad de la píldora postcoital lleve aparejado, a corto plazo, un menor uso de otros métodos más efectivos como el preservativo que previene embarazos no deseados y también las enfermedades de transmisión sexual”. Por ello, Ávila mostró “su preocupación” porque la libre dispensación a través de las farmacias “fomente el abandono progresivo de otros métodos anticonceptivos más efectivos como el preservativo masculino”.

El verdadero peligro está en que los jóvenes consideres la píldora postcoital como el único método”, advirtió el presidente del CECOVA, que recordó que la píldora postcoital “es un medicamento que solamente debe ser utilizado en situaciones de emergencia en caso de riesgo de embarazo, pero no puede considerarse un método anticonceptivo”.

Frente a la dispensación sin receta en oficinas de farmacia, el presidente del CECOVA defendió que la píldora del día después “se dispense de forma gratuita en los centros de salud y ambulatorios con el asesoramiento de los profesionales sanitarios especializados, que pueden llevar un control  adecuado y ofrecer una orientación sobre otros métodos anticonceptivos de mayor efectividad frente a enfermedades de transmisión sexual”.

Al respecto, José Antonio Ávila explicó que la píldora postcoital “no protege frente a las enfermedades de transmisión sexual como la gonorrea, el sífilis o el sida” y recordó que “la prevalencia de la sífilis y de la gonococia en la población general ha experimentado un incremento cercano al 500% desde finales de los años 90, mientras que la del VIH se mantiene estable, con una tasa actual del 0,3%”.

El CECOVA también lamentó “la ausencia de una campaña informativa previa sobre cómo y cuando usar la píldora postcoital y los riesgos de su utilización reiterada”.  “Si no se hace una campaña informativa correcta se convierta en el anticonceptivo predilecto de los adolescentes”, advirtió Ávila, que instó al Ministerio a “dejar claro que la píldora postcoital no es un método anticonceptivo y que sólo debe usarse en situaciones de emergencia”.

Enfermería Escolar
Del mismo modo, el CECOVA apostó por “dirigir las políticas públicas a fomentar los talleres de educación afectivo-sexual en los institutos y colegios mediante la implantación de la Enfermería Escolar” y aplaudió “el buen trabajo realizado hasta ahora por los profesionales de Enfermería en la difusión de conductas sanas en la relaciones sexuales”.

El CECOVA consideró que “la educación en el ámbito educativo a edades tempranas es la mejor forma de prevención en el ámbito sanitario y, en este sentido, el trabajo de las enfermeras en los colegios e institutos puede facilitar en gran medida la concienciación de los adolescentes sobre el uso racional de los métodos anticonceptivos y ayudar a solucionar dudas sobre enfermedades de transmisión sexual, embarazos no deseados y otros problemas”.

Al respecto, el CECOVA recordó que “la mayoría de los jóvenes que pide la píldora del día después alega la rotura del preservativo durante la relación sexual, aunque otros muchos manifiestan el mal uso de los métodos anticonceptivos debido al desconocimiento”. Por ello, apostó por “realizar un esfuerzo de información y de concienciación sobre el uso correcto de los métodos anticonceptivos más esenciales entre la juventud”.

Finalmente, el CECOVA apostó por “fomentar el uso de los preservativos masculino y femenino, posibilitar la venta de envases a precio asequible y con pocas unidades por parte de las empresas fabricantes, garantizar una amplia disponibilidad, comercializarlos de forma activa, y orientar a los jóvenes y adolescentes sobre su correcto uso para evitar riesgos”.

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