El ayuntamiento de Catarroja nombra “Hijo Adoptivo” al sacerdote Guillermo Valls, párroco desde hace más de 30 años
Por su labor como docente en el Instituto y como párroco
El sacerdote Juan Guillermo Valls Bonet, titular desde 1981 de la parroquia María Madre de la Iglesia, de la localidad valenciana de Catarroja, ha recibido el título de hijo adoptivo de este municipio de manos de la alcaldesa, Soledad Ramón, en un acto celebrado en el salón de plenos de su Ayuntamiento.
Valls recibió la placa conmemorativa en reconocimiento por su “notable trayectoria como docente y párroco al servicio de los ciudadanos”, según la alcaldesa que le agradeció su labor por haber hecho “Catarroja más grande” y por su “calidad humana al servicio de los demás”, tanto en sus años de docencia en el Instituto Berenguer Dalmau como en la parroquia. Todos estos años “son recordados con gran cariño por todos los catarrojenses”, añadió Ramón.
Por su parte, Guillermo Valls, que es natural de Albalat dels Tarongers, agradeció emocionado la distinción del Ayuntamiento y aseguró que durante toda su vida “no he buscado reconocimientos”, al tiempo que expresó su gratitud al Instituto donde ha impartido clases y a los feligreses de la parroquia, “por haberme hecho crecer como persona y como sacerdote”.
El acto contó con la presencia del alcalde de Albalat dels Tarongers, además de la corporación municipal de Catarroja al completo y compañeros, alumnos y amigos del homenajeado, además del cronista oficial de Catarroja, Antoni López.
