Oliver exige al Consell que salde los impagos con las oficinas de farmacia

El grupo socialista de Castellón ha presentado una declaración institucional para que el Ayuntamiento reclame a la Generalitat que salde de forma inmediata la deuda que mantiene con las farmacias, con el fin de aliviar los problemas financieros que tienen en estos momentos a causa de los impagos y que están deparando el desabastecimiento de medicamentos.

“El Gobierno valenciano está causando un daño gravísimo a las farmacias, pero sobre todo a la sanidad pública y al Estado del bienestar”, indica la concejala Carme Oliver, responsable de Sanidad en el grupo socialista de Castellón. “El Partido Popular debe rectificar de inmediato esta forma de gobernar caótica e insolidaria con los ciudadanos con menos recursos y dar prioridad a las política sociales que inciden de forma directa en la calidad de vida ciudadana”, añade.

La Generalitat Valenciana persiste en los impagos a las farmacias de Castellón y de la Comunidad Valenciana, lo que está agravando su supervivencia empresarial, en un momento de extrema crisis económica. El incumplimiento reiterado de los compromisos de pago que se han anunciando está llevando a las oficinas de farmacia a no poder comprar medicamentos, ya que han agotado todas sus vías de financiación.

Oliver recuerda que el alcalde de Castellón se comprometió en un pleno a mediar ante la Generalitat para saldar las deudas. Sin embargo, “no solo ha demostrado que no tiene peso político para influir en las decisiones de Valencia, sino que el propio Ayuntamiento ha mantenido una deuda durante muchos meses con las farmacias de la capital”.

El problema afecta a la totalidad de las farmacias de la ciudad de Castellón, algunas de las cuales han entrado en fase de concurso de acreedores, mientras que otras oficinas tienen que hacer frente a eventuales embargos ante la imposibilidad de hacer frente a todos los pagos de proveedores, nóminas o alquileres. Los bancos han cerrado el grifo de la financiación y el pago de medicamentos se ha de hacer al contado.

Una veintena de farmacias de la provincia de Castellón, algunas de ellas de la capital, ha decidido que la situación es “insostenible” y han anunciado su intención de reclamar vía judicial el dinero que les adeuda la Generalitat valenciana, según se acordó en una reunión celebrada hace unos días convocada para analizar los impagos a las farmacias.