Los tres planes especiales de Capuchinos, Centro Histórico y Tetuán-Ribalta protegen un total de 144 edificios de la ciudad

Los tres planes especiales de Capuchinos, Centro Histórico y Tetuán-Ribalta que serán aprobados de forma provisional en el próximo pleno y serán trasladados a la Conselleria de Territorio para su aprobación definitiva, protegerán un total de 144 edificios de la ciudad, tal y como ha confirmado hoy el concejal de Urbanismo, Javier Moliner, en la presentación de estos documentos definitivos de los tres Planes especiales de las zonas de protección del centro de Castellón.

Así, el edil ha clarificado qué son estos planes y cuál es su finalidad ya que los planes especiales de protección son herramientas urbanísticas, es decir, unos documentos de disciplina urbanística que simplemente lo que hacen es establecer los criterios que cualquier actuación urbana que se desarrolle en un ámbito concreto, debe cumplir.

Es decir, un plan especial no tiene presupuesto. No obliga a que se ejecute de manera inmediata nada. No es un proyecto de ejecución, un plan especial es una herramienta estratégica de futuro pero no obliga al propietario a hacerlo ahora. Con lo cual, estos documentos se destinan sólo a la salvaguarda de la imagen y valor futuro de nuestras zonas urbanas y nuestro legado patrimonial urbano, ha detallado el concejal de Urbanismo.

Moliner ha dicho también que la labor de análisis y redacción se tramitó en 2005. “Desde ese momento, los tres documentos pasaron su plazo de alegaciones. La contestación a las alegaciones. Han recibido hasta en tres ocasiones el informe de la Conselleria de Cultura e incluso en los casos de Capuchinos y del Centro, han recibido también el informe de la dirección territorial de cultura. Por tanto, a pesar de que comenzaron a fraguarse en 2005, nunca han visto detenida su tramitación y ahora entran en su recta final para recibir la aprobación definitiva.”, ha dicho

“Pero la realidad es que estos documentos, son herramientas complicadas y cuya redacción tiene la importancia de proteger el futuro del patrimonio urbano de Castellón y por lo tanto, hace falta el tiempo que sea necesario para tramitarlo y aprobarlo. La protección de las zonas del Centro, Capuchinos y Ribalta-Tetuán, se contempla en el Plan General de Ordenación urbana que se aprobó en el año 2000. Desde aquel año, es decir, desde hace 10 años, todos los miércoles se reúne la Comisión Técnica de Patrimonio para dirimir cualquier informe o situación que competa a un tema de protección patrimonial”, ha explicado Javier Moliner, quien ha afirmado que dicha comisión se ha reunido 350 veces y ha abordado cerca de mil expedientes que ha informado.

Por tanto, jamás, ningún edificio de valor patrimonial, ningún yacimiento urbano ni ninguna obra que se haya realizado en cualquiera de estas zonas, se ha hecho sin la supervisión e informe de esta Comisión, en la que participan los técnicos del Ayuntamiento y de la dirección general de patrimonio, ha insistido.

En definitiva, Castellón tiene un importante y cuidadoso sistema de protección de los valores patrimoniales urbanos que, en todos los casos se protegen por encima de todo.

El ámbito de los planes especiales

1. El ”Plan Especial Protección Ribalta-Tetuán”.
Su superficie está delimitada por el área conformada por la plaza Tetuan, la calle Zaragoza, la plaza de la Independencia, el parque de Ribalta y el entorno de la plaza de toros.

En su configuración se incluye la protección de 22 edificios:

2 de protección integral
8 de protección individual general
12 de protección parcial

2. “Plan Especial Protección Centro Histórico” (incluye el Núcleo Histórico Tradicional y aledaños)
Su superficie está conformada por el centro histórico, entendiendo su espacio como el que ocupaba el entorno de la muralla medieval del siglo XIV y al que se añade también el entorno de la plaza Huerto Sogueros.

En su configuración se incluyen 119 edificios protegidos:

7 de protección integral
25 de protección individual general
87 de protección parcial

3. “Plan Especial Capuchinos”
Su superficie se corresponde a la avenida de Capuchinos desde la plaza Mª Agustina y hasta las plaza Juan XXIII.

En su configuración se incluyen solo 3 edificios protegidos, con una protección parcial todos ellos.

De esta forma, Moliner ha dicho que el objetivo de estos planes es impedir la sustitución indiscriminada de edificios y a exigir que su conservación, implantación, reforma o renovación armonice con la tipología histórica

“Por eso, dentro de su regulación determina distintos tipos de protección de edificios, elementos o espacios, en función de su valor patrimonial”, ha dicho.

El concejal de Urbanismo ha explicado que los principales criterios son que se mantenga la estructura urbana histórica y arquitectónica y las características generales de la silueta paisajística, que no se permitirán modificaciones de alineaciones, alteraciones sobre la edificabilidad, parcelaciones ni agregaciones de inmuebles, se determine las características relativas a la conservación de fachadas y cubiertas y de los elementos más significativos de los edificios así por ejemplo toda nueva instalación urbana eléctrica, telefónica u otras, deben canalizarse subterráneamente, las antenas de televisión, aparatos de aire acondicionado y dispositivos similares se deben situar en lugares que no perjudiquen la imagen urbana o de parte del conjunto y se establece la normativa reguladora de la instalación de rótulos anunciadores de servicios públicos, de señalización y rótulos comerciales que deberán armonizar con el entorno; y se delimitan los ámbitos de protección arqueológica y los de vigilancia arqueológica.

Objetivos de los planes
“Lo que hemos querido plasmar en estos planes especiales, son las normas que permitan a la ciudad recuperar del Patrimonio cultural y urbano que han compuesto el tesoro de nuestra historia y que está todavía vivo en la ciudad. Hemos querido dejar patentes las acciones de rehabilitación y protección adecuadas que permitan la consideración de la ciudad histórica como centro de la ciudad, el corazón de la ciudad, es decir, en estos documentos, conforme vayan implantándose sus criterios, van a posibilitar, recuperar todavía más el centro histórico como un lugar residencial de calidad”, ha explicado Moliner, quien también ha afirmado que muchas ciudades sufren el abandono del centro histórico que acaba convirtiéndose en ghettos, porque no se permite ninguna remodelación y las casas, antiguas acaban siendo incómodas, sin los servicios de una vivienda moderna.

Castellón no va a ser así. Las normas que establecen estos planes, permiten adecuar con las acciones rehabilitadoras el parque residencial a las comodidades actuales y se promueve la mejora de la urbanización y de los servicios públicos, la intervención en espacios públicos, la previsión y ampliación y mejora de los equipamientos, se potencian las herramientas para poner en valor, por ejemplo, las vías peatonales, mejorar por ejemplo los servicios con nuevas cualidades, como por ejemplo alumbrado con sistemas de eficiencia energética que además de ahorrar, reduce la contaminación lumínica…o la implantación de zonas de velocidad reducida para bajar la intensidad del tráfico y mejorar las condiciones peatonales, establecer criterios únicos de mobiliario urbano: bancos, papeleras, modelos de farolas…, marcar fórmulas para mejorar el ajardinamiento y la dotación de espacios verdes… o la delimitación de zonas de equipamientos como aparcamientos y de otros servicios urbanos.

Fichas de catalogación
Además, estos planes especiales contemplan una herramienta muy útil para técnicos y arquitectos. Son las fichas de catalogación y su contenido permite de un vistazo conocer todos los pormenores de cada edificio protegido.

Tiene la denominación del edificio, localización geográfica, localización cronológica, autor, uso inicial, estado de conservación, entorno al que pertenecen, descripción y otros datos de interés, con el principal objetivo de controlar su recuperación.

Finalmente, estos Planes especiales, servirán también como base para poder solicitar ayudas financieras para los propietarios de los bienes catalogados, para su rehabilitación.