Calles exige al alcalde que defienda los intereses de Castellón ante Camps y que reclame los 300 millones de la deuda histórica de la Generalitat

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Castellón, Juan María Calles, exige al alcalde que “dé la cara por Castellón, defienda los intereses municipales y reclame, de una vez, la deuda histórica de la Generalitat con la capital de la Plana”, una cantidad que el PSPV estima ya en 300 millones de euros. “Alberto Fabra tiene que ir mañana a la reunión con el presidente del Consell con el traje de alcalde de Castellón, porque si va con el traje de diputado autonómico o con el traje de coordinador general del PP, los castellonenses seguiremos sin recibir ni un euro del Gobierno valenciano”, afirma.

Calles insta a Fabra a “reivindicar más para Castellón”. “El Ayuntamiento está perdiendo oportunidades de futuro por la desidia de un Partido Popular que no tiene un proyecto político para impulsar la capitalidad y para generar expectativas económicas en un momento de incertidumbre”, afirma. “Fabra está más pendiente de lo que digan los tribunales sobre el ‘caso Gürtel’ que de gobernar para reducir el desempleo y respaldar a empresas y trabajadores”.

El líder socialista apremia al alcalde a urgir la agilización del Plan Confianza, que prevé una inversión de 36 millones de euros hasta 2011. “Por el momento, no se ha redactado ni un proyecto, ni se ha recibido un céntimo de euro”. “Camps y Fabra están acostumbrados a prometer, a engañar a la ciudadanía con mil y una artimañas, pero a la hora de la verdad, Castellón sigue siendo la hermana pobre de la Comunitat Valenciana”, explica.

También insta a Fabra a “demostrar el peso del poder castellonense” en Valencia y reivindicar el Centre de Convencions y la sede de la VIU, dos iconos arquitectónicos diseñados por los prestigiosos arquitectos Santiago Calatrava y Frank Gerhy, así como la Ciudad de las Lenguas, Parc Castelló, el Tram y el Palau de la Festa. “Los presupuestos de la Generalitat Valenciana tienen en blanco la página de Castellón y queremos que Camps la llene con los millones de euros que el Consell nos adeuda a los castellonenses”, afirma.

Calles recuerda, también, que la Generalitat aún no ha aprobado definitivamente el Plan General de Ordenación Urbana que fue anulado por el Tribunal Supremo, y tampoco ha aprobado los tres planes especiales de protección del centro histórico. “La pasividad de la Generalitat está afectando a las estrategias de desarrollo de Castellón. Ni tramita los proyectos pendientes, ni nos da dinero para llevarlos adelante”, señala. En ese sentido, recuerda el “incumplimiento” del Fondo de Cooperación Municipal que ayudaría al Ayuntamiento a salir de la situación de “números rojos”.

El listado de infraestructuras pendientes en Castellón se amplía con los centros de salud, colegios de infantil y primaria, e institutos de Secundaria que han quedado sin financiación y se han ido postergando año tras año. “Hasta las ocho enmiendas que presentó el propio Alberto Fabra para subsanar los olvidos del Consell en el presupuesto autonómico han sido desestimadas por el grupo parlamentario popular. El PP ha dejado a la ciudad de Castellón a la deriva y entre todos hemos de evitar el naufragio”, concluye.