elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Valencià

10 escritores debaten sobre el presente y el futuro de la novela negra

    Crimen en el Casino bien podría ser el título de una serie negra. El céntrico y centenario edificio castellonense le aporta la dosis justa de empaque e historia que adornarían el Thriller. A eso solo le faltaba sumarle diez personalidades dispares, de procedencia y pluma, que bien podrían emular a aquellos diez negritos de la Christie, porque uno a uno, van desgranando su sincera y crítica opinión sobre el género negro.

    Julio Cano, aunque no nació en Castellón, si pace por estas tierras y se siente de aquí. “Es paradójico que mis novelas tengan mejores cifras en cualquier otra provincia que en Castellón. Por eso es tan importante plataformas como CastellóNegre. Este festival permite sostener y dar a conocer la literatura negra al gran público. Es un privilegio que escritores de talla nacional vengan a Castellón y así también se pone en valor a los escritores de aquí que estamos vendiendo fuera”.

    Cano, ha creado un protagonista, “el inspector Monfort” con grandes seguidores. “Creo que el lector que se alimenta de género negro y que incluso en algún tiempo estuvo mal visto, es ahora el que crea el caldo de cultivo necesario para que la novela negra esté en auge.”

    María José Moreno, la única mujer de todo el plantel de autores, ofrece una visión de una parte de la novela negra que pocos quieren escuchar, la de la denuncia social. Su trilogía es un ejemplo de la denuncia contra el abuso sexual de menores. Moreno explica que “las novelas que componen la trilogía, no está enfocadas en quién lo hizo sino en por qué. Lo que late en ellas es la manera en que algún trauma de la infancia marca a las personas y los impactos que tiene a la hora de desarrollar su empatía y el modo en que pueden llegar a pervertir las relaciones humanas. No se centran en el procedimiento policial, y el daño se perpetra por la manipulación y el engaño emocional, a menudo ejecutados por aquellas personas cercanas a la protagonista.”

    Precisamente, el director del festival, Pedro tejada, aborda “esa dualidad que esconde el género y que muchos ya distinguen bien. La novela policíaca es distinta, hay buenos y malos, hay un enigma, un caso por resolver. Pero la novela negra ha dado una vuelta de tuerca, es el testimonio de la cruda realidad, como se suele decir. La novela negra seguirá contando lo más ruín del día a día, le pese a quien le pese”.

    El escritor barcelonés, Pere Cervantes habla de su obra a caballo de estos dos subgéneros. Él fue durante 25 años policía nacional: su obra es principalmente policíaca, “pero no hay buenos y malos, porque la bondad absoluta no existe. Cada personaje, cada trama tiene una trastienda.”

    Por su parte, el escritor David G.Panadero, encargado en esta ocasión de moderar a Pasamontes y Del Valle, advierte un nuevo potencial entre los autores que ahora están pegando fuerte con sus moderados. “Tanto Pasamontes como Del Valle testimonian como incluso al ubicar sus novelas en el pasado se puede estar hablando de los problemas del presente. En el caso de Pasamontes, por una mala gestión política de una crisis energética, como en Chernobil. O la forma en que Ignacio DelValle habla de la autoridad laxa en el campo de batallas, donde se demuestra que demasiadas veces los abusos quedan impunes cuando se cometen al amparo de los poderosos”, detalla Panadero.

    David G. Panadero ha valorado la continuidad de CastellóNegre, “hay que ser valientes y seguir apostando por CastellóNegre para que los lectores sigan atreviéndose a comprar negro y demostrando que el crimen no compensa”.

     

    Subir