El Ayuntamiento y la Conselleria de Obras Públicas certifican su compromiso para que el TRAM no pase por el Ribalta
La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio ha firmado una resolución para corregir la situación irregular en la que se encontraba el TRAM ya que el recorrido actual no tenía la autorización formalizada
El concejal de Ordenación del Territorio, Movilidad y Área Metropolitana del Ayuntamiento de Castelló, Rafael Simó, y el director general de Obras Públicas, Transportes y Movilidad Urbana, Carlos Domingo, han mantenido una reunión para abordar la situación del TRAM de Castelló y han reafirmado el compromiso de ambas administraciones de que el TRAM no pase por el parque Ribalta.
El recorrido original de TRAM preveía discurrir por el interior del Parque Ribalta, sin embargo, las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana de 2012 y del Tribunal Supremo de 2014 fueron contrarias a este trazado.
Ante esta situación, el TRAM hasta el Grao se puso en funcionamiento por la calle Ribalta aunque no constaba ninguna autorización formalizada por parte de la anterior Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente. Ante esta anomalía, la nueva consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, ha regularizado este cambio del recorrido del TRAM con respecto al trazado original, algo que no ha supuesto ningún coste adicional.
Así, mediante una Resolución de la actual Conselleria, se ha autorizado al concesionario del TRAM una modificación del trazado por la calle Ribalta, zona de números pares, y de esta forma se ha corregido la situación irregular en que se encontraba la circulación del TRAM hasta este momento.
Por otra parte, las conclusiones de los técnicos, tanto del Ayuntamiento de Castelló como de la Conselleria, una vez ejecutado y puesto en explotación el trazado por el que discurre actualmente el TRAM - calles Ribalta, Zaragoza, Tetuán, Colón y Cardona Vives – son que cualquier otro recorrido provocaría en la ciudad un mayor impacto negativo tanto por lo que se refiere a la construcción y la explotación como en la demanda del servicio de transporte que los ocasionados por el trazado actual y, además, acarrearía un elevado coste económico.
Por último, desde las dos administraciones se ha destacado que se tendrá en cuenta la opinión de los vecinos de cara a cualquier mejora que se realice en este transporte.
