Marco resalta la victoria ciudadana del Peri 18 en la lucha contra la antena ilegal de telefonía móvil en Cronista Revest

La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Castellón, Amparo Marco, resalta la “victoria ciudadana” en la lucha contra la instalación de una antena de telefonía móvil en la calle Cronista Revest. La Comisión de Desarrollo de la Ciudad ha acordado hoy ordenar el restablecimiento de la legalidad urbanística y proceder a la demolición de las obras de la estación de telefonía en el número 16 de esta calle.

“El Partido Popular ha acatado, finalmente, la posición de los vecinos, que han insistido una y otra vez en la ilegalidad de las obras realizadas por una operadora de servicios telefónicos”, indica Marco, quien recuerda que el equipo de gobierno se había negado, incluso, a una moción conjunta presentada por los grupos de la oposición en la que se instaba a eliminar la antena.

Marco recuerda que el grupo socialista fue el primero en instar al alcalde a retirar la instalación. La portavoz del PSPV presentó diversas iniciativas en junio para comprobar la existencia de irregularidades. La antena de telefonía no tenía licencia urbanística y no había pagado las tasas municipales, lo que derivó en la apertura de un expediente de infracción. Marco reclamó de inmediato la retirada de la antena y la sanción a la empresa de telecomunicaciones infractora.

En diversas ocasiones, Marco había apremiado al equipo de gobierno municipal a ser “sensible” a las peticiones de la asociación vecinal, fundamentadas siempre por informes técnicos. “El Ayuntamiento tiene la obligación de escuchar a los vecinos cuando se han vulnerado sus derechos y, por supuesto, buscar soluciones rápidas y efectivas. Los vecinos del Peri 18 han defendido sus derechos con dignidad hasta que se les ha dado la razón”, añade.

La asociación de vecinos del Peri 18 había manifestado su queja por la colocación, a su juicio ilegal, de una antena de telefonía móvil en la azotea de un edificio del barrio. En ese sentido, se reclamó la paralización de las tareas de instalación y el desmantelamiento inmediato de la antena. La instalación se realizó a lo largo de todo un mes, en horario nocturno para no despertar las protestas de los residentes en el edificio y de los vecinos del barrio.

La instalación de antenas de telefonía móvil suele generar el rechazo de los habitantes de la zona en la que se instala, ante la sospecha de que pueden provocar efectos nocivos sobre la salud pública. En el caso del Peri 18, el edificio en el que se pretendía emplazar la antena está situado en las inmediaciones del colegio público Fadrell y de la residencia geriátrica Azahar.