Pep Grau invita a Font de Mora a inaugurar el curso escolar en los barracones de Benadressa

El concejal Pep Grau, responsable de Educación en el grupo municipal socialista de Castellón, invita al conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, a inaugurar el curso escolar en los barracones de Benadressa. “El Partido Popular está vapuleando la educación pública, a la que niega recursos y margina en beneficio de la educación privada, y el caso de Benadressa es un ejemplo de la degradación intencionada de la enseñanza que perpetra el Consell”, apunta.

La comunidad educativa espera la construcción del nuevo centro escolar desde 1995, año en el que la Conselleria de Educación lo anunció por primera vez, tras detectarse aluminosis en un centro que funcionaba desde 1968, ahora derruido. El proyecto también forma parte de Crea Escola, programa de actuaciones educativas presentado hace cinco años por el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, y por el entonces conseller de Educación, Esteban González Pons. “Benadressa no es un caso aislado, pero representa bien el estado de calamidad de la educación castellonense”, dice Grau.

Grau censura la “humillación” a la que el PP está “condenando” a miles de alumnos y alumnas de Castellón. “Los gobiernos del PP, primero con Zaplana y ahora con Camps, han llevado la educación pública a un punto crítico. El índice de fracaso escolar es clamoroso y exigiría que la Generalitat multiplicase esfuerzos políticos y presupuesto para garantizar una mejor calidad educativa a los centros de Primaria de la capital”, señala.

El concejal del PSPV achaca a Font de Mora y a la concejala Beatriz Gascó la “responsabilidad” por el deterioro educativo. “El conseller está consiguiendo materializar un plan preconcebido para convertir en negocio un fundamento del Estado del bienestar como es la educación pública y de calidad, mientras que la concejala se dedica a avivar la xenofobia, al achacar a los extranjeros los indignos porcentajes de fracaso escolar que sufre Castellón”, explica.

Grau afirma que “con la décima parte de lo que el Consell de Camps se gasta en grandes fastos en la ciudad de Valencia, se solucionaría el déficit de centros y se reforzaría la plantilla de educadores”. “Castellón sigue siendo un cero a la izquierda para un partido que ha convertido las instituciones públicas en instrumentos para perpetuarse en el poder, sin tener en cuenta las necesidades de la ciudadanía y, lo que es peor, gobernando a la contra del interés general para beneficiar a unos pocos”, concluye.