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El Ayuntamiento de Castellón analiza vías para la prevención de grupos radicales violentos

El Ayuntamiento de Castellón analiza vías para la prevención de grupos radicales violentos

    La Escuela de Seguridad Pública del Ayuntamiento de Castellón (ESPAC) organiza el curso ‘Aproximación al fenómeno de la radicalización violenta’, cuyo objeto de análisis se centra desde los colectivos juveniles violentos con posturas políticas extremas –ultras, skinheads,  antisistema o antifascistas– hasta las comunidades islamistas radicales. Se trata de una jornada dirigida al personal municipal que se impartirá el 19 de noviembre con la intención de precisar las técnicas para detectar grupos radicales y prevenir así la planificación de actos violentos contra la población general.

    “La formación de los cuerpos policiales es esencial para afrontar los grandes retos que se nos presentan a las ciudades en materia de seguridad”, afirma la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, quien ocupa la presidencia de la Comisión de Seguridad y Convivencia de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). “Castellón es una ciudad segura, pero las administraciones públicas debemos coordinar las estrategias para garantizar la tranquilidad y la calidad de vida de la ciudadanía”, ha añadido la primer edil.­

    El curso de la ESPAC está integrado por cinco módulos, que abordan la radicalización, extremismo violento y contranarrativa entre los más jóvenes; los grupos juveniles violentos de extrema derecha, tanto de partidos políticos como de grupos ultras o de skinheads; la radicalización islamista en menores y adultos; los grupos violentos de extrema izquierda, desde grupos antisistema de ideología anarquista hasta organizaciones antifascistas; y la contranarrativa al discurso radical y de odio. En el transcurso de los debates se expondrán ejemplos de programas europeos de desradicalización.

    En este sentido, la alcaldesa ha recordado la “voluntad” del Ayuntamiento de Castellón por garantizar la seguridad ciudadana ante la amenaza global de los grupos de naturaleza violenta. Una preocupación que se intensificó tras los atentados en las Ramblas de Barcelona en el verano de 2017, cuando Castellón estableció un plan perimetral de zonas sensibles en el que se incluía la implantación de elementos de contención para dificultar o impedir el acceso a vehículos a zonas de gran afluencia de peatones, según recuerda el concejal de Seguridad Pública, Antonio Lorenzo.

    Lorenzo recalca que el Área de Seguridad Pública ya había realizado actuaciones preventivas en acontecimientos sociales de presencia masiva, como es el caso de las fiestas de la Magdalena, Sant Pere, Navidad y la Nit de Sant Joan, con la colocación de vehículos pesados en lugares estratégicos.

     

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