El alcalde de Castellón veta la moción para reprobar la conducta política de Carlos Fabra

El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, ha vetado la moción del PSPV-PSOE para reprobar la conducta política de Carlos Fabra, concejal del Partido Popular y presidente de la Diputación Provincial. El alcalde ha justificado la “inadmisión a trámite” de la iniciativa por “no tratarse de un asunto de ámbito local”. Sin embargo, la moción ya había sido introducida por la Secretaría de la Corporación en el orden del día del pleno que se celebrará el próximo jueves y el grupo popular incluso había presentado una enmienda.

El portavoz socialista, Juan María Calles, denuncia el “déficit democrático” de Alberto Fabra y le acusa de “dar cobertura política a un concejal con graves imputaciones judiciales por presuntos delitos contra la Administración, fraude fiscal y falsificación documental”. Calles censura la “nula autoridad política y moral del alcalde, que se ha limitado a acatar las órdenes que a golpe de corneta le han llegado desde la Diputación”.

“El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castellón ha perdido el norte y está cautivo del fabrismo”, afirma Calles. El dirigente socialista ha acusado a Alberto Fabra de “perder las riendas” de la institución. “El alcalde es incapaz de controlar los excesos políticos de Carlos Fabra y sus concejales han sobrepasado la línea de lo admisible en sus ataques a la oposición socialista”, ha dicho, en referencia a las “declaraciones calumniosas” que le dirigió el jueves la portavoz adjunta del PP, Marta Gallén.

El líder socialista ha reclamado hoy al alcalde, en la Junta de Portavoces, que inste a Gallén a pedir excusas públicas, antes de que el PSPV decida emprender acciones judiciales. La edil del PP acusó a Calles de “actuación corrupta”, “abuso de poder” y “uso fraudulento del cargo” por “cesar a un alto cargo de Trabajo” cuando ocupaba el cargo de subdelegado del Gobierno en Castellón. Sin embargo, el PP ha rechazado la oferta lanzada por Juan María Calles.

El PP había intentado “enmascarar” la moción socialista con una enmienda en la que pretendía reprobar al portavoz socialista. “Parece ser que la única forma que el alcalde concibe de defender la integridad de a su concejal es poniendo en marcha una campaña con injurias y calumnias”, lamenta Calles.

Calles califica de “absurdas” las excusas ofrecidas por el alcalde para vetar la moción reprobatoria de Carlos Fabra. El pleno municipal debatirá el jueves una iniciativa del grupo popular para exigir la construcción del acceso ferroviario al puerto de Castellón, “un proyecto que no es competencia municipal, pero que será llevado al pleno sólo por el interés partidista y sectario del PP”. “La única excusa para no debatir la moción socialista es la de no tener que salir en defensa de alguien indefendible”, agrega.

El grupo socialista presentó para su debate en el pleno municipal una moción de reprobación de la conducta política del concejal y presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, por la vulneración del Código de Buen Gobierno de los Miembros Corporativos, aprobado por el pleno el 25 de mayo de 2006. Este código fue concebido en su día como una guía del comportamiento ético de las concejalas y los concejales y como el marco en el que se desarrolle la actividad de los ediles.

“El Código de Buen Gobierno ha sido vulnerado por Fabra y el grupo socialista quería que el pleno reprobara la falta de ética del concejal del PP”, aclara Calles, quién afirma que “al margen de que la Justicia determine si el comportamiento de Carlos Fabra es delictivo, lo que no ofrece duda ninguna es que el concejal del PP ha perseguido con su actividad política intereses empresariales, familiares y clientelares”.

Calles recuerda que “Fabra ha actuado de mediador con el Gobierno y con la Generalitat para favorecer a empresas familiares y a terceras personas, por lo que no hace falta esperar una resolución judicial para imputarle la acusación de haber convertido la Diputación en una asesoría a la que acuden quienes buscan la ayuda del Gran Conseguidor de Castellón” y añade que “Fabra ha evitado abstenerse en negocios y actividades financieras que comprometían la objetividad de la Administración”.

Calles añade que “desde el grupo municipal socialista, y desde la sociedad civil, entendemos que Carlos Fabra está actuando de espaldas a la transparencia y a la verdad, con afán de silenciar y oscurecer los graves hechos de los que se le acusan y que le han puesto en la picota como el político sobre el que pende la sospecha más grande sobre prácticas corruptas en la Administración en el periodo democrático”. “Y la actitud cómplice de Alberto Fabra no es menos censurable”, agrega.