Tradición y tendencias en indumentaria fallera se conjugan en “Artesanía Manolo”

Junto a la Plaza de las Monjas en Burriana una pequeña mercería denominada “Artesanía Manolo” abrió sus puertas en 1960. Concretamente ubicada en la calle Pintor Ribalta, dicha mercería regentada por Manolo Lengua es ahora un comercio más que consolidado en la ciudad, que no hace más que abrirse camino en el sector textil.

Las hijas del fundador, Carmen y Rosana Lengua, son las encargadas de tomar el testigo que dejó su padre y actualizar el negocio adaptándolo a las nuevas necesidades.

Entre la variedad de sus productos como son prendas de ropa y abrigo, ropa interior, accesorios y complementos, bisutería y elementos de mercería, requiere una mención especial el sector dedicado a la indumentaria valenciana. No solo cuentan con los principales aspectos para la confección de un vestido, ya sea para hombre o mujer, sino que gran variedad de proveedores les abastecen para que una persona pueda salir totalmente vestida y peinada acorde con la indumentaria valenciana.

Sus conocimientos en el ámbito de la indumentaria propician un asesoramiento profesional a sus clientes. Asimismo, disponen de gran variedad de tejidos entre los que se pueden adquirir rayones, damascos, brocados y sedas de gran variedad, así como manteletas, aderezos, peinetas, medias y postizos elaborados con pelo natural.

En el caso del hombre, también disponen de diversos tejidos para la elaboración de chalecos o todo el conjunto de torrentí o saragüells así como ofrecen la oportunidad de adquirir todo el vestuario ya confeccionado.

Con la llegada del mes de marzo, mes de las fiestas falleras, las propietarias de Artesanía Manolo declaran que se registra un incremento de clientes, que mayormente requieren de arreglos de confección en sus vestidos, así como accesorios que completar con su indumentaria. “Una vez finaliza la campaña de Navidades, ya comenzamos a preparar la campaña de Fallas. Es ya en enero o febrero cuando comenzamos a recibir pedidos relacionados con el sector fallero, para que esté todo preparado para la semana fallera”, afirmaba una de las propietarias. No obstante matizaba que hasta el día de San José, son numerosas las demandas que reciben diariamente relacionadas con el sector fallero.

Novedades en el sector de la indumentaria
Uno de los principales debates en el sector de la indumentaria que perdura a lo largo de los años es si es posible la innovación en el campo de la indumentaria tradicional valenciana. Sin embargo, las hermanas Lengua aseguran que, sin meterse en controversias, la indumentaria sigue cada año una serie de pautas y tendencias que se verán reflejadas en base a los modelos que lucirán a lo largo de este ejercicio las Falleras Mayores de Valencia. “Las Falleras Mayores son las que claramente marcan la tendencia de lo que se llevará en el próximo año” aseveraban, de modo que explicaban que de cara al próximo año la tendencia será que queden en un segundo plano las manteletas y delantales de tul cristal cediendo su protagonismo a las manteletas y delantales confeccionados sobre una base de seda natural de “nipi”. Se trata de una seda que tiene mayor volumen lo que la dota de más opacidad respecto a la seda tradicional. Asimismo, al tener más cuerpo crea una sensación de abullonamiento.

Por otra parte, siguiendo con la indumentaria femenina, declaraban que han percibido un incremento en la demanda de tejidos adomascados o damascos. Un tejido que puede confeccionarse con seda aunque en la actualidad también los realizan a base de algodón o diversas fibras sintéticas, lo que se percibe en los precios, siendo mucho más accesibles.

En lo que respecta a la indumentaria masculina, las propietarias señalaban que “todavía en Burriana los hombres son más tímidos a la hora de vestirse”, apuntando a que predomina de forma significativa el uso del pantalón de rallas, la camisa de hilo y el correspondiente chaleco. Aunque en gran parte de los casos, los hombres adquieren el chaleco ya confeccionado, destacaban que hay otros que prefieren elegir tejidos un poco más ricos y confeccionarse el chaleco en base a un diseño específico. Aunque poco a poco son más los hombres que se animan a vestirse con la indumentaria tradicional, de modo que, afirmaban, es cuestión de tiempo que en la ciudad se vaya ampliando el género en este sector.

A partir del día 20 de marzo llegan las rebajas en indumentaria
Tras el periplo fallero, el propio día 20 de marzo darán comienzo las rebajas en todo el entramado de la indumentaria. A pesar de que en algunos productos que se están liquidando en la actualidad, ya se pueden encontrar precios muy asequibles y competitivos, las propietarias de Artesanía Manolo, destacaban que tras las Fallas, todo el género fallero adquiere considerables descuentos.

En este sentido, señalaban que, “de un año hacia otro no se percibe un cambio considerable en las tendencias en indumentaria, de manera que es un aspecto a resaltar el hecho de que puedan adquirirse productos de temporada a un precio más económico”.