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El Ayuntamiento de Burriana logra el reconocimiento de la Font del Vi como Fiesta de Interés Turístico

El Ayuntamiento de Burriana logra el reconocimiento de la Font del Vi como Fiesta de Interés Turístico
  • La declaración se suma a los títulos honoríficos de las Fallas de Burriana, obtenido en 2007 y de la festividad de las Cruces de Mayo, otorgado el pasado mes de marzo

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El Ayuntamiento de Burriana logra el reconocimiento de la Font del Vi como Fiesta de Interés Turístico - (foto 2)
El Ayuntamiento de Burriana logra el reconocimiento de la Font del Vi como Fiesta de Interés Turístico - (foto 3)
El Ayuntamiento de Burriana ha recibido esta semana una resolución dictada el pasado día 13 por la consellera de Turismo, Belén Juste, por la que se otorga el título honorífico de Fiesta de Interés Turístico Provincial de la Comunitat Valenciana a la Font del Vi de las fiestas patronales de Sant Blai de Burriana.

Tras el estudio de la documentación aportada por el Ayuntamiento y, a la vista del informe favorable del área de producto de l’Agència Valenciana del Turisme, la Conselleria de Turismo ha inscrito a la Font del Vi de Burriana como nueva Fiesta de Interés Turístico en el Registro Especial de Fiestas, Itinerarios, Publicaciones y Obras Audiovisuales de Interés Turístico de la Comunitat Valenciana.

Hace justo un año, el 26 de octubre de 2009 y a instancias de la concejal de Turismo en el Ayuntamiento, Gloria Fandos, el Ayuntamiento remitió la solicitud y los correspondientes informes y documentación instando dicho reconocimiento.

Fandos ha mostrado hoy su satisfacción ante este nuevo reconocimiento a unas celebraciones o tradiciones arraigadas en Burriana, que se suma a la declaración como Fiestas de Interés Turístico tanto de las Fallas en 2007 y de las Cruces de Mayo, en marzo de este mismo año 2010.

“Se trata de un justo premio a la labor realizada por el Ayuntamiento para ofrecer un valor añadido a nuestras fiestas y tradiciones, y podemos decir con orgullo que somos uno de los municipios con más declaraciones de Fiestas de Interés Turístico”, señala Fandos, quien ha destacado el trabajo de quienes, año tras año, mantienen viva esta tradición. Asimismo, recuerda el impulso del Consistorio en el ámbito del turismo gastronómico para potenciar productos propios como la naranja, a través de la Setmana Gastronòmica de la Taronja; o dels coents y la sepia, con ferias de degustación y la creación de una imagen de marca comercial.

La concejal de Turismo informa que, a partir de ahora, la Font del Vi acompañará a las Fallas de Burriana y a las Cruces de Mayo en aquellos folletos e informaciones divulgativas en las guías turísticas de la Generalitat Valenciana, “y desde la Concejalía de Turismo seguiremos trabajando para potenciar todo aquello que es propio de Burriana y que merezca la pena resaltar de entre nuestras tradiciones, con el fin de fijar la base para crear una marca y un producto diferenciado sobre los que construir el modelo turístico en los próximos años”, concluye Gloria Fandos.

Tradición y origen de la Font del Vi
La Font del Vi se ha convertido en toda una tradición en Burriana y es uno de los actos más singulares de la celebración, el 3 de febrero, de la festividad patronal en honor a Sant Blai. Centenares de vecinos participan de esta fiesta popular al inicio de la jornada festiva, tras la Eucaristía en el templo dedicado al patrón en la calle del mismo nombre.

La Font del Vi, de estructura metálica, mide 2,5 metros de altura y está coronada por el escudo de la ciudad. En los últimos años, una carpa cubre y protege la fuente y a sus usuarios ante posibles inclemencias meteorológicas.

Antes de que brote el vino de esta particular fuente, poetas y versadores locales recitan sus odas al santo y a la festividad patronal, tradición que consolidó durante las primeras décadas del siglo XX el poeta burrianense Juan Bautista Tejedo Beltrán, Batistet el bessó.

La fuente sirve el vino por gravedad, procedente de un depósito situado en la primera planta de la vivienda colindante -antigua bodega y fábrica de gaseosa- a través de un tubo. El vino, más de 400 litros en total, sale a través de seis surtidores, que vierten sobre un amplio vaso metálico, en torno al cual se sitúan los vecinos que quieren servirse el vino.

El Ayuntamiento ofrece también a los "catadores" un pequeño bocadillo de longaniza o morcilla para completar el almuerzo popular y de los que cada año se reparten más de 2.000.

La Font del Vi tiene su origen en un acuerdo municipal adoptado el 5 de enero de 1854, según recogió en 1932 el historiador Francisco Roca Alcayde en su Historia de Burriana. Meses antes, la ciudad había sido víctima de una fuerte epidemia de paludismo y, al remitir la enfermedad y normalizarse la situación, se acordó otorgar el carácter de patronal a la fiesta de Sant Blai e instaurar la Font del Vi, inicialmente programada a las seis de la mañana y actualmente celebrada en torno a las 9.30 horas.

El cultivo de la viña y la producción vinícola, prohibida la cosecha del arroz por las enfermedades que ocasionaba el agua estancada en su cultivo, se convirtieron en la principal fuente de riqueza en el campo agrícola de Burriana durante el siglo XVIII y gran parte del siglo XIX hasta la introducción de la citricultura. La viña llegó a convertirse en el primer cultivo del término municipal, sobre todo en una gran bolsa de terreno agrícola situado entre el Camí Caminàs y el actual límite entre Burriana, Nules y les Alqueries, al Oeste del término, en la zona históricamente conocida como Campo Romero, del que salieron importantes y reconocidos vinos.

La aparición de plagas como el mildiu o la filoxera y su grave afectación a este cultivo, forzaron la introducción, en torno a 1840, de los primeros naranjos en Burriana, posiblemente el primer lugar de la provincia en el que se plantaron cítricos. La epidemia del mildiu se cebó con Burriana en la campaña de 1885, según recoge Joaquim Aparici Vilar en su libro Agricultura al terme de Burriana, lo que acabó por destinar definitivamente todo el término municipal al monocultivo del naranjo.

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