Calpe se muestra partidario de soportar durante más tiempo la carga financiera antes que malvender la Papelera

El alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, no es partidario de malvender la papelera, pese a que la deuda de Burriana asciende a 22,3 millones de euros, situándose el porcentaje de endeudamiento en el 116 %. Más de la mitad del débito está motivado en lo que el Ayuntamiento ha tenido que pagar por la antigua fábrica. De no ser así, la deuda municipal rondaría el 60 %.

En estos momentos, explicó el alcalde “estamos dentro del límite legal, pero hemos de reconocer que nos ha salvado el “gong”, porque el tope se incrementó el año pasado a todos los Ayuntamientos; lo cual quiere decir que el problema no sólo es de Burriana, sino de todas las administraciones públicas; aunque tengo la impresión de que pocos dirigentes están cogiendo el toro por los cuernos y diciendo la verdad”.

“El endeudamiento, subrayó Calpe, es uno de los peores enemigos de las administraciones públicas. Sin duda financia inversiones, y a todos nos gusta hacerlas, pero luego condiciona mucho los presupuestos. Nosotros tenemos 22 millones, y el problema de tenerlos es que al año que viene habremos de pagar entre intereses y amortizaciones alrededor de 5 millones de euros. Si nosotros debiéramos la mitad, a lo mejor, en vez de tener que pagar 5 millones de euros tendríamos que pagar 2,5 millones, lo cual quiere decir que los otros 2,5 los podríamos gastar en mil cosas. Por eso es un objetivo fundamental reducir la deuda”.

En cuanto a vender la papelera, matizó “siempre lo hemos contemplado, y de hecho estamos en una modificación del plan general, dando al solar usos alternativos, que pueden ser atractivos para ponerla en el mercado. Eso sí, lo que tampoco podemos hacer es venderla a cualquier precio. Yo estaría más por la labor de seguir padeciendo la carga financiera un tiempo, antes que venderla, si el precio que sacamos no es razonable. Sería difícil de entender que después de adquirirla perdiéramos dinero vendiéndola. De entrada, estamos hablando de un precio de salida que yo actualmente creo que el mercado es muy difícil que nos lo pueda ofrecer”. En este sentido, significó, “lo he dicho muchas veces; yo creo que los magistrados están poniendo precios a las expropiaciones que actualmente no tienen nada que ver con la realidad. Ha pasado en este ayuntamiento, y está pasando en otros, porque lo vemos en la prensa todos los días. Nosotros hemos de cumplir las sentencias, y he de decir que el año que viene todavía nos queda por pagar 1 millón de euros de la papelera, y hemos de resolver esa cuestión”.

Del precio total a desembolsar por la antigua fábrica: 10.451.698 euros, queda pendiente, antes del 31 de enero de 2011, 1.094.124 euros, cantidad que responde a 1.042.023 euros que faltan, más un 5 % de intereses de demora.

Asimismo, durante 2011, habrá que pagar 146.000 euros más, por otros 8.000 m² situados junto a la papelera, que han sido valorados como rústicos, aunque sus propietarios van a recurrir, pues reclaman 3,2 millones de euros.