Burriana retoma el plan de mejora de agua potable con la renovación de la red en calles Ample, Progreso y Santa Cristina

El Ayuntamiento de Burriana ha iniciado las obras correspondientes al ejercicio 2010 del Plan de Mejora de Infraestructuras de Agua Potable con actuaciones en las zonas de Carrer Ample y en las de las calles Progreso y Santa Cristina, a cargo de la empresa concesionaria del servicio, Facsa.

Las obras en el primer vial y su entorno comenzaron el pasado día 10 de mayo y consisten en el desdoblamiento de la actual conducción única de fibrocemento situada bajo la calzada, que se reemplaza por dos tuberías de polietileno de mayor diámetro y que se ubican debajo de cada acera. El concejal de Vía Pública, Pedro Sancerni, supervisó el inicio de los trabajos y atendió a las explicaciones técnicas del responsable del servicio en Burriana, Rafael Lahuerta.

La modernización de la red ha permitido anular las largas acometidas de plomo del Carrer Ample, que partían desde la única tubería de fibrocemento y cuya reparación requería la apertura de una zanja que, dependiendo del margen de la calle, podía ocupar todo el ancho de la misma. La empresa concesionaria instala también las nuevas acometidas de las viviendas, que no superan el metro de longitud, son de mayor diámetro y están fabricadas con materiales mucho más resistentes y flexibles, desde la conducción bajo la acera hasta el punto de suministro de cada abonado.
Este lunes comenzaron las obras en la zona de la calle Progreso con una actuación en la calle San Ernesto.

Todas estas mejoras de renovación permiten ampliar la capacidad y la presión de la red de abastecimiento de agua potable, lo que mejora el servicio a los usuarios, al tiempo que elimina cualquier fuga y facilita el control de los consumos y la reparación o actuación ante cualquier anomalía.

El Plan de Plan de Mejora de Infraestructuras de Agua Potable de Burriana, uno de los más ambiciosos de toda la provincia, se aprobó en 2003 y comenzó su andadura en 2004. A lo largo de estos años, se ha actuado en gran parte del casco urbano y se ha logrado mejorar de forma espectacular la eficiencia de la red. En este sentido, a pesar del crecimiento del número de habitantes y del consiguiente aumento del consumo de agua, la mejora de la red y la progresiva eliminación de fugas ha permitido invertir la tendencia y reducir progresivamente los metros cúbicos de agua inyectados en la red desde el depósito de cabecera. Así, sólo en estos primeros cuatro meses del año el caudal inyectado en red se ha situado entre los 9.500 y los 10.000 metros cúbicos por día, cuando el pasado año en el mismo período la cifra llegó a rozar los 11.000 y en 2008 los sobrepasó ampliamente.