La Unió de Llauradors i Ramaders aconseja no aceptar un precio de expropiación por el AVE por debajo de 9.972 euros por hanegada

La Unió de Llauradors i Ramaders aconseja no aceptar un precio por debajo de los 12 euros el metro cuadrado para las expropiaciones del AVE, o lo que es lo mismo, 9.972 euros la hanegada, aunque advierten que ellos van exigir más para sus agricultores en base a las condiciones particulares de cada propietario. El secretario general de la Unió de Llauradors, Vicent Goterris, a quien acompañaba el secretario local, Juan José Molés, y los técnicos de la Unió, Cassià Martorell y Salvador Bosch, ha manifestado esta tarde durante una asamblea informativa con algunos afectados por la expropiación del AVE en Burriana que no cabe duda que esta infraestructura va a beneficiar al conjunto de la sociedad y generará más riqueza, “pero si todos se benefician, lo lógico es que quienes ponen su patrimonio para que eso sea posible también ganen, porque es de justicia”.

El salón de actos del Centro Social de la Caixa Rural Sant Josep ha acabado llenándose de los primeros propietarios afectados, ávidos de información, después de haber recibido una carta para acudir entre los días 12 y 19 de mayo al Ayuntamiento para el alzamiento de actos previos a la ocupación del primero de los dos tramos que afectan a la ciudad. Los técnicos de la Unió han aconsejado acudir informados y asesorados, bien a través de ellos, o de cualquier otro gestor, sin miedo, y exigiendo lo que se crea que es justo, desde el precio del terreno al arbolado, e incluyendo si hay una alquería “incluso una higuera o rosales, pues todo tiene un precio justificando su existencia”. Para Martorell y Bosch este paso, aunque en él todavía no se firma el acta de ocupación ni se notifica el precio, es muy importante para clarificar cualquier duda y plantear las condiciones del propietario. Un ejemplo formulado por uno de los asistentes ha planteado que tiene seis hanegadas y el AVE, que en algunos casos afecta a un ancho de 80 metros, le pasa por el medio, dejándole sólo tres hanegadas, partidas por la mitad. En este caso, le han explicado desde la Unió, le han de dejar acceso obligatoriamente a los dos parcelas resultantes, así como el riego garantizado, y si dicha división afecta de manera clara la productividad de la explotación por no ser viable en base al número de metros que han quedado también se puede exigir una indemnización por demérito en base a la reducción de superficie y división de finca.

Otro tema planteado es que a muchos les han comunicado no una ocupación definitiva, sino sólo temporal. Esto, lo hacen, según han explicado, porque necesitan terrenos para hacer acopio de materiales, como la tierra vegetal de los huertos que quitan, porque no les sirve para asentar el talud, y luego la emplean para recubrir el terraplén. Los técnicos de la Unió han opinado que este es uno de los peores casos porque te destrozan el huerto y luego te lo devuelven, aunque suelen indemnizar todo el vuelo, es decir naranjos y cosecha, y un 10 % del valor de expropiación por cada año que pasa, aunque al final han reconocido que estos propietarios suelen acabar bastante mal parados.

Otro aspecto que también preocupa a los propietarios es si encima de ser expropiados luego han de pagar impuestos de lo que cobren. Aquí han informado que existe mucha controversia, pendiente de una resolución del Tribunal Supremo, pues en principio la ley de 1954 dice una cosa pero por parte de Hacienda se está interpretando otra. En este sentido es un tema que están suscitando para que se cambie la ley a fin de clarificar este asunto.

Desde la Unió de Llauradors han aconsejado que se luche y se recurra si es preciso hasta el Jurado de Expropiación pues está demostrado que el final se obtiene un mayor precio, aunque después de un periodo de dos años, aunque en caso de tener la razón el Estado ha de retribuir los intereses.