Carmen, la niña de Burriana sin escolarizar por un diagnóstico 'erróneo' de autismo

Carmen es una niña de 9 años que vive en Burriana pero no va al colegio. El motivo, un "diagnóstico erróneo de autismo", que le ha hecho sufrir estrés y depresión en los centros por los que ha pasado debido a la modalidad educativa en la que se encuentra. Es lo que denuncian sus padres, que han preferido escolarizarla en casa antes que seguir viviendo "una situación insostenible para la salud mental de la pequeña".

Pero, ¿Qué es lo que ha fallado? La historia se remonta a hace seis años, cuando Carmen entró en el colegio: "Los orientadores educativos -que no tienen potestad legal para hacerlo- le realizaron un falso diagnóstico de autismo obligándola a un tipo de modalidad educativa que a la niña la ha llevado a enfermar al cabo de los años", según explica su madre, María Gil, en una entrevista con elperiodic.com.

Se da la circunstancia que Ana desde pequeña había sufrido problemas de audición -fue operada de sordera bilateral- lo que produjo un retraso en la adquisición del lenguaje y en el aprendizaje. Su madre argumenta que ese problema nada tiene que ver con el autismo y que ese "falso diagnóstico" le ha llevado a su hija a seguir una vía educativa que no era la que le correspondía.

Una situación que llevó a la pequeña sufrir "estrés postraumático por las pésimas condiciones escolares de maltrato y aislamiento, con episodios de ansiedad y problemas digestivos". Su madre pone como ejemplo de maltrato que la obligaban a comer forzándole y sujetándola hasta tres personas a la vez. Esto sucedió en el centro Penyagolosa de Burriana y decidieron sacarla del colegio, además de denunciar la situación por la vía penal. Precisamente, hace unos días que la Audiencia Provincial ha sobreseído el caso pero la familia va a alegar.

Tras esta experiencia, en el siguiente curso pidieron un cambio de centro y otra valoración y se le destinó al centro Grans i Menuts de Castellón, lugar en el que estuvo "aislada" no solo físicamente -estaba en una sala sola con un cuidador- sino también socialmente al no ir a excursiones, siempre según denuncia su madre.

María Gil relata a este digital que tras esta mala experiencia de nuevo, se pidió el traslado a otros centros pero siempre con respuesta negativa por parte de Conselleria. Finalmente, y tras varios intentos de cambio de centro, en noviembre de 2016 decidieron no llevarla más a Grans i Menuts: "Mi hija lleva un año y medio sin ir al colegio y hemos conseguido que su salud mental mejore, por tanto el problema viene a raíz del entorno escolar y por eso queremos que cambie", detalla su madre.

Carmen recibe ahora clases particulares en casa: "Nos ha costado sudor y lágrimas que se le quite la ansiedad y mejore pero hemos visto un cambio de 180 grados en comparación con cuando iba a Grans i Menuts". El centro, según denuncia la madre, comunicó la situación de absentismo a Servicios Sociales y la Fiscalía de Menores abrió una investigación que finalmente quedó archivada tras los informes médicos.

Sus padres han recurrido incluso a la Federación de Autismo en España para solicitar informes externos a los que realiza la Conselleria: "En Madrid nos dijeron, tras evaluarla durante cuatro días, que tenían serias dudas de que mi hija tuviera autismo".

Y mientras la pequeña Carmen sigue estudiando en casa, sus padres luchan por conseguirle un centro. Su madre, María Gil, pide en declaraciones a elperiodic.com que se le dé la oportunidad educativa que necesita y que se le trate con respeto: "La niña ha sido maltratada física y psicológicamente, ha sido aislada en un centro durante curso y medio y ha necesitado un año para recuperarse de las secuelas que le han quedado". Sus padres piden que se tenga en cuenta el "diagnóstico real" a la hora de asignarle el centro.

Conselleria: "Hemos actuado bajo la legalidad vigente"

Desde la Conselleria de Educación explican que se han realizado hasta cinco informes psicopedagógicos a Carmen y que la modalidad educativa de escolarización que le corresponde es en centros que reúnan requisitos específicos como centros de educación especial o unidades específicas de comunicación y lenguaje.

Educación añade: "La Dirección Territorial de Educación en Castellón estimó que la alumna tenía que seguir escolarizándose en el centro 'Grans i Menuts' de Castellón ya que cuenta con los recursos apropiados para atender las necesidades de la alumna, que es lo más importante en esta cuestión, ya que hay que velar por los derechos y necesidades de la menor".

La Conselleria argumenta que "siempre se ha facilitado la posibilidad de escolarizar" a la alumna en el resto de centros que reúnen las condiciones para atenderla y que están en Burriana, Vila-real y Castellón. "Lo que pasa -detallan estas mismas fuentes- es que la familia desestima escolarizar en ningún centro sostenido con fondos público con el personal adecuado y la administración no puede escolarizar a un alumno con necesidades educativas específicas en centros educativos que no reúnan las condiciones".

En respuesta a las preguntas de elperiodic.com, estas mismas fuentes defienden que la administración ha actuado "conforme a la legalidad vigente porque ha de garantizar la adecuada escolarización de la alumna". Desde Educación concluyen que se ofrecerá a la familia la realización de un nuevo diagnóstico.