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La asociación de vecinos de la Vila impugna la información pública del Plan Especial de la Ciutat Vella y muestra su desacuerdo con el documento

La asociación de vecinos de la Vila impugna la información pública del Plan Especial de la Ciutat Vella y muestra su desacuerdo con el documento
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    Mañana a mediodía finaliza el plazo de presentación de alegaciones al Plan Especial de Protección de la Ciutat Vella y Entorno de Sant Blai de Burriana. En este sentido, la asociación de vecinos de La Vila, que preside Ximo Sorolla, ya ha presentado un amplio documento de alegaciones, llegando incluso a impugnar el anuncio de información pública por entender que no se han cumplido las reglas que establece Reglamento de Ordenación y Gestión Territorial y Urbanística, por lo que solicitan que se redacte un nuevo anuncio de información pública en consonancia con la legislación vigente.

    La asociación de Vecinos de la Vila expresa en sus alegaciones que no están de acuerdo con la declaración de zona de protección de yacimientos arqueológicos o paleontológicos porque les grava tanto económicamente, como moralmente, al tener que aceptar arqueólogos en sus viviendas cuando tengan que hacer alguna reparación de cierta envergadura en el subsuelo o de reestructuración. Tampoco comparten la obligatoriedad de contratar a un técnico competente para que elabore un informe cada cinco años sobre el estado de sus viviendas, lo cual entienden que supone un gravamen importante. En este sentido solicitan que se haga cargo la Administración Local o Autonómica de todos esos gastos para que no se produzcan agravios comparativos.

    La Vila también alega la falta de previsión de aparcamiento público, también para residentes, porque el Plan Especial restringe aún más los aparcamientos en la vía pública. También se quejan de que no se declaren más calles peatonales, pues en su mayoría son estrechas y soportan un tráfico excesivo a unas velocidades que provocan sobresaltos.

    La asociación critica, asimismo, la falta de previsión por no tener en cuenta la renovación del sistema de alcantarillado y agua potable en toda la extensión que se pretende proteger.

    En resumen, esta asociación de vecinos del casco histórico acusa al equipo de Gobierno de falta de diálogo previo con los afectados, sus asociaciones y sus representantes legales.

    Por su parte, el alcalde, José Ramón Calpe, ha manifestado su intención de reunirse con los representantes de esta Asociación para incorporar al documento aquellas pretensiones que en buena lógica puedan ser asumidas por el municipio, aunque también recordó que fueron invitados a la presentación pública del documento, que tuvo lugar el pasado 14 de julio, y no acudieron.

    Ese día, el redactor del Plan Especial de Protección de la Ciutat Vella y el entorno de Sant Blai de Burriana, el arquitecto Francisco Taberner Pastor, explicó que el documento pretende desarrollar una normativa en un ámbito concreto, como el de la Ciutat Vella, que permita el control de todo lo que se vaya a hacer. Incluye una memoria justificativa, una normativa con texto articulado, un catálogo con un fichero, inventariando los edificios que tienen un valor y que se dividen en tres grupos; los de interés integral, que son tres: la casa de Bernabé Peris (Club 53), el Círculo Frutero y el Mercado; luego están los de interés parcial en los que se obliga a mantener determinados elementos como las fachadas modernistas, que incluyen 55 edificios; por último están los edificios de protección ambiental, que se han de respetar por su carácter envolvente dentro de su entorno, bien por sus alturas, su cubierta de teja, etc., que suman otros 93 edificios. Además están los bienes de interés cultural (BIC) de la iglesia de El Salvador y el exconvento de la Mercè, y los bienes de relevancia local (BRL) como Sant Blai, los Carmelitas o las Dominicas. En total suman 158 edificios protegidos en el catálogo.

    El Plan Especial genera un Área de Rehabilitación Urbana (ARUD) que permitirá obtener facilidades y ayudas para la rehabilitación de edificios.

    También regula las obras de conservación, restauración y reforma compatibles con el nivel de protección. Define usos y actividades compatibles con el carácter de la zona. Establece una normativa para la publicidad y rótulos de servicios públicos. Regula las antenas de televisión y dispositivos similares en los tejados, las instalaciones eléctricas, telefonía o de cualquier naturaleza, proponiendo canalizaciones subterráneas. También establece como se han de hacer las nuevas fachadas para que armonicen con el resto, teniendo en cuenta texturas y colores, sin desmerecer al conjunto que se pretende proteger. Asimismo incide en los espacios públicos, el establecimiento de áreas peatonales, de circulación y estacionamiento.

    El Plan Especial pretende mantener la estructura urbana y arquitectónica del conjunto y las características generales del ambiente y la silueta paisajística. No se permitirán modificaciones de alineaciones salvo que contribuyan a la mejor conservación del conjunto.

    Respecto a las parcelas del Casco Histórico se propone una ocupación del 80 % de la superficie para mantener la estructura tradicional de patios interiores.

    En el pleno celebrado el pasado 30 de julio se aprobó someter a información pública el Plan Especial cuyo periodo de alegaciones finaliza mañana.

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