Villancicos y belenes para despedir las clases hasta después de la Navidad

Los colegios de Burriana han celebrado numerosos actos en los que han dado la bienvenida a la Navidad y han clausurado las clases para recibir las esperadas vacaciones.

Guarderías como la Infante Felipe han reunido a padres y niños en un espectáculo de música y espíritu navideño en el que los más pequeños han empezado a conocer esta especial época del año.

Los pequeños de la guardería Los Ángeles han representado en su Belén Viviente el Nacimiento del niño Jesús y lo han hecho, en vez de con un niño, con una niña, María Fandos, como protagonista.

Illes Columbretes pasó toda una jornada realizando talleres navideños en los que los niños de primaria pusieron a prueba sus habilidades, para más tarde clausurar el día con villancicos, como también hizo el colegio de la Consolación.

Salesianos representó por sexto año consecutivo su ya instaurado Belén viviente. Los alumnos de todos los niveles, así como los profesores se han volcado en una actividad que ha logrado transformar el patio del centro en una dinámica representación del nacimiento del Niño Jesús.

Como comentaba a este periódico el director de la escuela, el sacerdote Fernando Miranda, esta iniciativa es su particular forma de poner fin a las clases antes de las vacaciones y de "celebrar la navidad de otra manera y con un carácter propio del colegio y espíritu cristiano".

Durante la mañana se ha vivido una jornada de puertas abiertas en las que el público ha podido disfrutar de dos actuaciones en las que un grupo de niños representaba la Anunciación, la llegada a Belén y la llegada de los tres Reyes Magos. Los alumnos, de infantil y primaria iban disfrazados de animales, pastores, panaderos, carpinteros... mientras que los más mayores, de segundo de Bachiller han tomado parte en la organización y el cuidado de los pequeños.

Durante el último mes, además, el colegio ha organizado un taller en el que padres y voluntarios han creado adornos navideños, estampitas y otras manualidades que, junto con tartas y demás bollería casera han vendido con un fin solidario: destinar los fondos recaudados para SOS Siria para víctimas de guerra.

Como destacaba Miranda, tras felicitar las pascuas, "Esto es la verdadera lotería, el que toda la gente esté aquí viviendo y celebrando lo mismo." Ya que, para él, "Lo más bonito de la navidad es regalar el tiempo y la persona de cada uno a los demás".