Los socialistas se oponen a la privatización del agua potable y la red de alcantarillado de Burriana
El pasado 19 de junio de 2014 se publicó el anuncio de licitación para la contratación de los servicios de abastecimiento de agua potable y alcantarillado de Burriana, de conformidad con el acuerdo adoptado en el pleno del Ayuntamiento el 5 de junio solo con los votos a favor del PP. El PSOE se abstuvo en la votación al no facilitarle el equipo de gobierno popular toda la documentación con tiempo suficiente para ser estudiada.
Los Socialistas no comparten la idea del PP de que este nuevo contrato, que a partir del año que viene integrará los servicios de suministro de agua potable y red de alcantarillado y los privatizará mediante concesión administrativa de su gestión, beneficie el interés público por cuanto, según los populares, incrementa la eficiencia de los recursos, tal y como se justifica en una memoria firmada por Calpe el pasado 1 de abril de 2014.
El Alcalde argumenta que la unificación de ambos servicios en un único contrato y un único operador se traducirá en un ahorro en los recursos públicos, tanto en cuanto se simultanearan actuaciones en las redes y existirá una única estructura de explotación y gestión. En palabras del Secretario General de los Socialistas, Vicent Aparisi, "es obvio que unificar la gestión de los servicios puede generar mayor eficiencia de los recursos, pero el partido Socialista se cuestiona entonces por qué se concesiona a una empresa privada la gestión. Si el objetivo es simultanear en la medida de lo posible la gestión del servicio –se pregunta Aparisi- por qué no se unifican los servicios pero bajo gestión directa del Ayuntamiento."
El PSOE afirma que los servicios de agua y alcantarillado no son deficitarios y por lo tanto no es necesaria la inversión privada, "el alcantarillado es actualmente de gestión pública y nunca se gasta más de lo que se ingresa, -afirma Cristina Rius, edil socialista de Hacienda- es más, nunca se llega a invertir en renovar la red todo lo que se ingresa, una vez descontados los gastos directos de gestión y mantenimiento"
Los Socialistas sostienen que la gestión privada es incompatible con la eficiencia de recursos y ahorro, en palabras de Vicent Aparisi "es obvio que cualquier empresa privada saca un margen de beneficio por el trabajo realizado y se suele confundir desgraciadamente, la gestión eficiente de los recursos con el recorte de gastos para obtener más beneficios, lo que condiciona la calidad del servicio. La gestión pública siempre es más barata y si se hace bien no tiene porque dejar de ser eficiente -continua Aparisi- lo que no quita que puntualmente se tenga que subcontratar actuaciones concretas, como son las obras de renovación, por carecer el Ayuntamiento de plantilla y medios materiales específicos para realizarlas, pero eso no justifica la privatización total del servicio"
El PSOE afirma que el gran perjudicado va a ser el ciudadano por la presumible pérdida de calidad del servicio y por el encarecimiento del mismo, según apunta Cristina Rius "en el caso del alcantarillado el pago dejará de cobrarse como un tributo y pasará a ser una tarifa autorizada gestionada por una empresa privada, lo que significa que no estará exento de IVA, por lo que como mínimo el recibo subirá un 10%".
Los Socialistas por todo ello afirman que no apoyarán mediante sus votos la concesión administrativa de los servicios de agua y alcantarillado en contrato único, y esperan que su recurso de reposición sea atendido y el equipo de gobierno popular de marcha atrás al expediente.
