Junta Local Fallera sometida al cambio

Pocas horas después de que las llamas se apoderarán de la ciudad, era Paco Collado, hasta el momento secretario de JLF, quien comenzaba de forma voluntaria el cambio de la Junta al presentar su dimisión.

Los motivos que acompañan la dimisión de esta persona entregada a las Fallas desde que tiene uso de memoria, son el agotamiento y sus nietos, de quienes se ocupa con devoción mientras su hijo y su nuera se dedican a la jornada laboral.

La decisión de abandonar el cargo llega tras 13 años al frente de la secretaría de JLF, trece años en los que ha tenido tiempo de ordenar e informatizar todos los documentos de JLF, conocer a un total de 14 Reinas Falleras de la Ciudad, tres presidentes de Junta Local Fallera, dos alcaldías distintas e incluso jubilarse ocupando el cargo.

Antes incluso de pertenecer a JLF, Collado participó ya de forma activa y entregada en el mundo de las Fallas siendo fallero de La Vila (1977-1978) y del Barri d’Onda (1978 - 1994), pasión que se incrementó al desaparecer su mayor apoyo, su esposa, el año 1991. En la primera de las comisiones señaladas pasó dos años de fallero sin que estuviera inscrito en los censos falleros, por un despiste humano. Por lo que se refiere a la segunda de las comisiones, perteneció a la misma hasta el año 1996, en el que Ferrada le pidió que se ocupara del cargo en su afán de dotar Junta Local Fallera de personas de confianza.

Paco Collado, amante de todo lo que significara Fallas, aceptó de buen grado el cargo aunque, siendo consciente de su poca disponibilidad en aquellos momentos, puso como condición que se buscara a otra persona ya que su ayuda tendría una duración máxima de un año. Se trataba del año 1996, con la ahora concejala Ana Montagut como Reina Fallera de Burriana y Francisco Lloret de presidente, un año de cambios también para Junta Local Fallera. Como el lector podrá imaginar la condición que impuso Collado en su nombramiento no llegó nunca a cumplirse porque el amor por las Fallas de este hombre y la insistencia de unos y otros miembros de JLF han llevado a Paco Collado a sumar ya un total de 13 años ejerciendo en el cargo.

Francisco Isach, expresidente de JLF, en unas declaraciones a elperiodic.com afirmaba que “Paco es una persona insustituible, inagotable; una persona para todo lo que necesitaras. Todo aquello en lo que se implicaba lo hacía con pasión y por eso hacía todo tan bien”.

Según el mismo Collado declaraba, ser secretario de JLF es muy sacrificado puesto que implica muchas competencias que a la simple vista no se ven: insignias, actas de las reuniones, censo, banderines, bandas, atención al público, etc. En definitiva, si en algo coinciden todos aquellos que conocen el cargo es que este necesita de una persona con dedicación completa y que de verdad ame las Fallas. Unos requisitos, a priori, difíciles de encontrar motivo que de momento está trayendo a JLF de cabeza. Hasta que no se encuentre y, según nos decía el expresidente de JLF, "hasta que no aparezca una figura definitiva para ocupar el cargo, será Raquel Solaz, actual delegada de falleras infantiles de la Junta, quien hará de secretaria en funciones".

Otro cambio que se ha dado en JLF ha sido el puesto de la presidencia, ocupado hasta el momento por Fancisco Isach Benedito. En una reunión convocada ayer por el alcalde de la ciudad, José Ramón Calpe, con todos los concejales, se les comunicó una serie de cambios en las concejalías, buscando, según éste declaró “dar un impulso a la actividad municipal y la acción de gobierno”.

Lo cierto en todo esto es que Isach abandona el cargo justo en el meridiano de la legislatura del actual gobierno y vuelve a recaer el mismo en Pedro Sancerni, anterior Presidente de la JLF durante los ejercicios 2003 al 2007, el cual, en declaraciones a elperiodic.com, se mostraba contento por el nombramiento y, según afirmaba, con ilusión y ganas renovadas.