El desdoblamiento de la CV-18 entre Burriana y Almassora acumula un retraso considerable por problemas de financiación

Las obras del desdoblamiento de la CV-18 entre Burriana y Almassora se han reanudado esta semana después de que hayan permanecido paradas por espacio de quince días. No es la primera vez que esto ocurre, pues todos los que transitan a diario por el vial han visto como periódicamente se han ralentizado los trabajos. Hoy, en cambio, había una actividad inusual, e incluso había varios técnicos de Consellería visitando las obras.

Según ha podido saber elperiodic.com, en el fondo de este asunto existe un problema de financiación. La empresa adjudicataria Ferrovial Agroman SA decidió paralizar los trabajos hace tres semanas ante la falta de un calendario de pago de la obra que debía estar terminada a principios del próximo mes de septiembre, y que se alargará hasta el año que viene, pues todavía no se ha iniciado la ampliación del puente del Millars. A este respecto, en estos momentos los técnicos de Consellería y la empresa todavía están negociando sobre esta infraestructura, dado que existen unas modificaciones de carácter técnico que van a encarecer la obra. El puente se había proyectado sobre zapatas y finalmente se hará mediante sistema de pilotaje, que representa un mayor coste.

Aunque el plazo de ejecución era de 18 meses desde la colocación de la primera piedra, el 13 de febrero de 2008, la Generalitat sí manifestó entonces que la inversión iba a ser distribuida en tres anualidades de cinco millones de euros cada una, hasta liquidar el precio de contrata de 15.103.305,51 euros.

El desdoblamiento de la carretera CV-18 Burriana-Almassora surgió por primera vez en los presupuestos de la Generalitat para el ejercicio 2002, y desde el 2004 aparecía con consignación para iniciar su tramitación. En Mayo de 2004 el entonces Conseller de Infraestructuras y Transporte, José Ramón García Antón, con motivo de la colocación de la primera piedra de la duplicación de la CV-18 entre Nules y Burriana, anunció que el tramo Burriana-Almassora saldría a licitación en octubre de 2004. Al final, salió publicada en el DOGV del 30 de mayo de 2007 y las obras se adjudicaron el 11 de enero de 2008.

Estos problemas de financiación de la administración autonómica está generando bastante desconfianza de cara a otros proyectos, como el desdoblamiento de la CV-185 entre Burriana y Vila-real, e incluso aquellos que han sido aprobados en el plan Confianza.

La nueva infraestructura, que por su estado de ejecución acumulará al final un retraso considerable, comienza en las inmediaciones del cementerio, en la rotonda de finalización de la Ronda de Burriana, sobre la CV-18, y afecta a una longitud de vial de 6.927 metros.

A partir de esta intersección se está ejecutando el desdoblamiento tratando de mantener la actual carretera en calidad de una de las calzadas de la duplicación. Está proyectado un nuevo puente sobre el río Millars en paralelo al existente – en la parte hacia el mar –, con una longitud total de 211 metros, siete vanos de diferentes luces y un ancho de tablero de 13,5 metros.

Después de cruzar el Millars, el desdoblamiento se está adaptando al trazado de la variante de Almassora, que ya disponía de espacio necesario para ubicar la segunda calzada. La sección tipo adoptada dispone de doble calzada, caminos de reposición para el tráfico agrícola, carril bici y una mediana ajardinada.

Las obras incluyen la construcción de una nueva rotonda justo después del cruce con el Camí Vell de la Mar de Vila-real y la ampliación de cuatro glorietas más. Además incluyen trabajos de señalización, balizamiento, seguridad vial, drenaje, servicio de alumbrado público en el tronco principal y la iluminación de las rotondas.