Costas autoriza los derrumbes de las casas más próximas al mar en Sant Gregori
En las próximas semanas se retomarán los trabajos, que se habían suspendido por el estado de alarma
Vuelven los movimientos en el proyecto Golf Sant Gregori de Burriana tras haber estado unos meses paralizado por el estado de alarma. Tal y como ha podido saber elperiodic.com, Costas autorizó hace unos días los derrumbes de las casas más próximas al mar. Hasta el momento no se habían podido tocar ya que están dentro del dominio marítimo terrestre y requerían de la autorización administrativa pertinente, también de la Confederación.
El estado de alarma paralizó todos los trámites y está previsto que se retomen los trabajos a finales de este mes, han confirmado fuentes de la urbanizadora a este digital. De hecho, a falta de unas semanas para que se apruebe el modificado del proyecto, este mismo mes se podrían licitar las obras, que empezarían como tal a finales de septiembre.
Los tiempos se han ralentizado por la pandemia pero desde el ayuntamiento de Burriana explican que está todo listo para dar luz verde a la modificación del proyecto, requerimiento necesario para comenzar el grueso del plan y que ha de pasar por el pleno: “El proyecto ya podría aprobarse tal cual pero estamos haciendo pequeñas modificaciones, como cambios en algunas tuberías, los depósitos de agua o la red de gas, para dejarlo todo lo más atado posible”, ha explicado el concejal de Ordenación del Territorio, Bruno Arnandis a elperiodic.com.
Los propietarios piden agilidad en la administración local
Mientras, desde la asociación de propietarios de Sant Gregori, ven con optimismo la reanudación de los trabajos pero piden rapidez a la administración local: “El Ayuntamiento tendría que ser más ágil en la toma de decisiones”, declara a este digital Enrique Daudí, para quien el urbanizador sí está haciendo los deberes.
En cualquier caso, y pese a lo ralentizado del proyecto, el hecho de que se haya visto paralizado temporalmente no es sino una pequeña piedra en el camino: “Llevamos veinte años que nunca es el momento y, visto lo que ha pasado con la pandemia, creemos que este proyecto para a ser un puntal importantísimo para la recuperación de Burriana”, concluye Daudí.
Así, si los movimientos se retoman y se cumplen los tiempos previstos por administración y urbanizadora, a finales de septiembre podría empezar el grueso del proyecto, valorado en unos 90 millones de euros y que urbanizará dos millones y medio de metros cuadrados frente a la costa de Burriana, generando casi dos kilómetros de nuevas playas.
El proyecto, según cálculos de la urbanizadora, podrá llegar a albergar 7.000 viviendas, centros comerciales, hoteles, un campo de golf de unos 800.000 metros cuadrados, así como sector terciario (tiendas, restaurantes, ocio…).
