El Bloc pide las dimisiones de Perelló y Sancerni por entender que tienen parte de responsabilidad en las inundaciones
El diputado autonómico, Josep María Pañella, acompañado por el Secretario Local, Vicent Verdegal, visitó la ciudad para entrevistarse con algunos vecinos y comprobar in situ que es lo que sucedió el fatídico 29 de septiembre.
Pañella manifestó junto a la avenida Cañada Blanch, que “visitar el terreno nos ha permitido confirmar nuestras conclusiones previas. Tenemos un urbanismo que no tiene en cuenta la climatología de nuestro país. Ver este pantano que se ha hecho aquí – avenida Cañada Blanch - es verificar como se programa sin tener en cuenta un hecho prioritario: las características del terreno, la orografía y sobre todo la climatología. Siempre que hablamos de urbanismo hemos de adaptarnos al lugar. No es lo mismo el urbanismo que se hace en la montaña, en un lugar llano, que en un lugar como este que es de recogida de aguas. Lo que nos preocupa no es este caso, porque tiene un remedio relativo, sino quién va a asumir responsabilidades de todo el daño que se ha producido. Aquí hay personas económicamente muy perjudicadas, y hay que buscar soluciones mediante líneas económicas, que se exima del pago del IBI a los vecinos, y que se logre la compensación del Estado para que esos fondos reinviertan en solucionar los problemas hidráulicos que se han detectado”.
“Todo lo que hemos planteado, añadió Pañella, son acciones de gobierno, y por nuestra parte lo que vamos a hacer es vigilar que todo eso se cumpla. Estamos demasiado acostumbrados a que tanto desde el gobierno central como el gobierno de la Generalitat se diga que se van a tomar medidas y luego pasan años y años… Tengo un ejemplo reciente; el incendio de la comarca del Alcalatén del que llevamos casi dos años y que por pugnas entre Valencia y Madrid los afectados tampoco han cobrado. Es muy bonito que venga Camps aquí el día que está lloviendo a decir: tranquilos, lo arreglaremos todo, aunque a mi lo que me hubiera gustado es que se hubiera puesto las botas y se hubiera puesto a quitar agua, pero eso no lo hará porque tiene miedo de mancharse el traje”.
El Secretario local, Vicent Verdegal, afirmó que “el problema de Burriana es el urbanismo caótico que se ha hecho. No se ha respetado aquello que la naturaleza nos exige: mantener las reglas del juego. Todas las zonas en las que el agua se puede acumular lo que no podemos hacer es cerrarlas, hacer muros, como ha pasado en la Serratella, o en la avenida Mediterránea, y hay un grave problema en Burriana a nivel de drenaje. No es sólo la zona del puerto, sino también la Serratella y la Malva-rosa. Hay una serie de barrancos que hay que canalizar y mantener. El alcantarillado hay que actualizarlo. No podemos tener las mismas infraestructuras que hace 30 o 40 años, cuando en el puerto había cuatro casas y ahora viven 10.000 personas. Eso por lo que a la zona aluvial se refiere. Las marjales, acequias, golas… hay que mantenerlas y se subsanaría en buena medida el problema del litoral”.
“Otro problema, añadió, son dos barrancos que se han desbordado enseguida. Uno, el del Marjalet, que cada cuatro gotas que caen cortan la carretera de Vila-real y la CV-18 que se está remodelando y que también se anegó porque no han previsto hacer un puente en algo que es un barranco, y como tal está registrado en lo que llamamos cauces subactuales”.
“En la N-340, otro barranco, el de Betxí, también la cortó, y Burriana se quedó totalmente aislada porque las infraestructuras del Estado y la Generalitat lo que han hecho es hacer retenciones de agua y pantanos: la N-340, la vía del tren, la variante de Burriana, la avenida Vicente Cañada Blanch, y en general todas las urbanizaciones de nueva creación. Y eso no es cuestión de realizar ahora un proyecto de infraestructuras hidráulicas, que sin duda es necesario, sino del trabajo del día a día, y de que cuando se apruebe un nuevo proyecto se tengan en consideración estas cuestiones”
“El concejal de urbanismo, Javier Perelló, debería hacer lo que hace un señor cuando está en esas instancias y hace una cosa mal; es decir, dimitir. Y el señor Sancerni si no mantuvo abiertas las golas de la Serratella se trata de una negligencia por su parte, y si ha ocasionado graves daños, hay que pedir también claramente su dimisión”, concluyó.
Sancerni no cobra el sueldazo q cobra cada mes por mojarse y trabajar en las inundaciones. Lo cobra por trabajar todo el año entre otras cosas para q no tengamos unas infraestructuras hidraulicas y de alcanterillado tercermundistas que acrecienten el efecto de una gota fria. Si no lo sabias, ya lo sabes.