El Ayuntamiento quiere relanzar el plan "Burriana en bici" impulsado en 2004 en colaboración con el IES Llombai

El Ayuntamiento de Burriana, aprovechando que a través de la concejalía de Turismo se ha puesto en funcionamiento un servicio de préstamo de bicicletas con el fin de favorecer el desplazamiento en este medio de transporte por la ciudad, quiere retomar un ambicioso proyecto iniciado hace seis años con el nombre “Burriana en bici” en el que se implicaron no sólo el equipo de Gobierno, sino también la Policía Local y especialmente el IES Llombai.

“Burriana en bici”, inspirado en el estudio de movilidad redactado por la Universidad Politécnica de Valencia en 2001, se planteó como un plan a largo plazo, promovido por el IES y el Ayuntamiento, a 12 años vista, para su aplicación en varias etapas, que perseguía una ciudad más habitable, un avance en la calidad de vida, y un impulso para lograr un desarrollo más sostenible. El plan-director (2004-2015) implicaba viales para ciclistas, zonas de aparcamiento, soportes metálicos, cámaras de vigilancia, señalizaciones, campañas de seguridad y de educación vial, foros de debate, cursos de reparación-mantenimiento de la bicicleta, sistema de préstamo, etc.

Fruto de aquel plan en 2005 se presupuestaron 30.000 euros para la adquisición de 50 bicicletas, que son precisamente las que desde este mes se facilitan en la oficina de turismo, y varios triciclos para discapacitados. En 2006 se ejecutó la señalización y la habilitación de un carril bici en la avenida Jaume I, que se prolongó a la avenida Cardenal Tarancón, orientando un itinerario desde el camí Llombai hasta la de la carretera del Grao, con una longitud de 1,3 kilómetros. También se instalaron aparcamientos de bicicletas en el Centre Municipal de Cultura la Mercé, Casal Jove, los dos Institutos, la Piscina, la plaza Mayor o la zona deportiva de Llombai.

A principios de 2007, producto del plan, se montó una exposición en el IES Llombai con el título “Amsterdam, el Vici de la Bici” que reunía un centenar de fotografías de profesor Jesús Bernat. Justo un mes más tarde, en el Casal Jove se organizó un taller de mecánica de reparación de bicicletas, a cargo del profesor del Departamento de Mecánica del IES Llombai, Francisco Martínez, donde se dieron a conocer los distintos sistemas y componentes de las bicicletas, y los participantes pudieron aprender a cambiar una cadena, reparar pinchazos, sustituir frenos y otros componentes y, en general, saber cómo mantener en condiciones un vehículo de dos ruedas.

“Burriana en bici”, aparte de los carriles en las avenidas de circunvalación, suponía cuatro conexiones radiales, partiendo del centro de la ciudad, hacia los diferentes puntos cardinales, buscando el IES Jaume I, el camí Llombai, la zona de los Salesianos y Casal Jove, y la zona del actual IES Llombai en Novenes de Calatrava. Para ello se estudiaron vías alternativas sólo dedicadas al tránsito de bicicletas. Por ejemplo, para ir desde el centro al camí Llombai, se proponía, en vez de ir por el Raval, las calles Sant Jaume, Santa Bárbara y Canalejas, para la conexión centro-norte las calles Tichell, Purísima, Trinitat, Santa Rosa, San Juan Bosco y República Argentina. Estos itinerarios, cuya ejecución incluso fue anunciada en el caso del primer itinerario, fueron analizados por la Policía Local antes de ser señalizados y pintados. En este sentido, había viales segregados, de uso exclusivo para bicis y los residentes de la calle, y otros compartidos por coches y bicicletas, por falta de otras alternativas.

Este plan se trasladó a la Dirección General de Transportes y causó sensación a Vicente Domine que anunció su disposición a colaborar financieramente para la adquisición de bolardos escamoteables para aquellas calles sólo compartidas por bicicletas y residentes.

Sin embargo “Burriana en bici” desapareció de la agenda política, principalmente por los problemas presupuestarios del Ayuntamiento, aunque no todo era inversión.

Únicamente, hace un año, se solicitó una ayuda, que fue denegada, para dotar al camí Fondo de un sólo sentido para la circulación, lo que permitiría crear un carril bici que conectaría la zona marítima con Novenes de Calatrava, solucionando el grave problema que supone no tener carril bici entre el casco urbano y la playa, a causa de que todavía no se ha urbanizado la carretera del Puerto. La Consellería de Infraestructuras y Transporte convocó en marzo del año pasado unas ayudas económicas a iniciativas en materia de movilidad sostenible, como proyectos de carriles-bici, por las que subvencionaba el 100 % del proyecto y el 80 % de las infraestructuras, pero no hubo suerte.

A falta de urbanizar la carretera del Puerto, el tramo de carril bici en el camí Fondo permitiría crear un circuito en bicicleta que discurriría por este vial, la avenida de la Unión Europea de Novenes de Calatrava, camí de Les Salines, Clot de la Mare de Deu y avenida de la Mediterrànea.