El Ayuntamiento se plantea derribar la antigua papelera El Mijares el próximo año
El último accidente unido al largo historial de este inmueble, sucedió hace cuatro años cuando un indigente extranjero fue rescatado de una de las fosas existentes en el interior de la antigua papelera El Mijares, tras precipitarse desde una altura de tres metros y medio.
El herido, de unos cuarenta años, tuvo que se rescatado por los bomberos, personal sanitario y la guardia civil, con unas cuerdas, para lograr sacarlo de la fosa donde permanecía, con una pierna rota y múltiples magulladuras. El accidentado pernoctaba en el interior de la antigua factoría, que se encuentra en estado ruinoso desde que cerró sus puertas en 1988.
Hace doce años un indigente de Logroño, conocido por “el Polaco”, mató y descuartizó a otro de nacionalidad portuguesa. Durante una semana fue quemando en una de las antiguas balsas de papel los trozos del cuerpo del indigente conocido como “el portugués”. Tres meses antes de este suceso, en Enero de 1997, murió en el interior otra indigente, Carmen Calomargo, aunque se certificó que fue por causas naturales.
Desde principios de los noventa se ha estado hablando de la necesidad urgente de derribar el edificio, ya que además de indigentes también se cuelan niños en busca de aventuras.
Quienes más han frecuentado el inmueble durante los últimos años han sido los graffiters, hasta el punto de que la antigua fábrica se ha convertido en un museo de este arte vinculado a la corriente del hip hop. En su interior se pueden contemplar obras que van mucho más allá de los típicos “tags” con los que se identifican los graffiters. El hecho de que éstos hayan tenido tranquilidad para realizar sus creaciones en el interior de la Papelera, ha ofrecido como resultado obras sorprendentes.
Con independencia de que se resuelva la venta del solar de la Papelera, para que el Ayuntamiento recupere los 4.853.894 euros pagados como justiprecio, tras la sentencia dictada por el tribunal de expropiación, no cabe duda que para el municipio sería un importante paso derribar un inmueble que ha supuesto un peligro constante en las últimas dos décadas, y que además confiere un aspecto sombrío a la entrada de Burriana desde Les Alqueries.
De momento que la derriben ya que supone un peligro. Después ya se verá lo que harán, que esta papelera como muchos temas de Burriana andan mucho en danza, menos proyectos, ideas, y planes y más hechos.