Emociones corporales y mujeres luchadoras son los protagonistas de la exposición de la Casa de Cultura
El lunes día 10 de marzo las paredes de la Sala A de la Casa de Cultura estrenarán nueva vestimenta. La diseñadora de esta vestimenta es Arantxa Esteban, la artífice de las exposiciones Diafragmas abiertos y Amapolas Rojas.
En la primera parte, la artista pinta el interior del cuerpo humano intentando expresar la conexión entre las emociones y la corporalidad que se trabaja dentro de la medicina china, una disciplina que Arantxa descubrió gracias a su formación en Chi kung y que decidió incorporar a su vida y a su trabajo pictórico. La segunda parte, Amapolas Rojas, ofrece grandes cuadros de flores, cicatrices y textos que intentan conectar con la necesidad de protesta de la mujer luchadora tanto en el ámbito social como en la privacidad de sus casas.
Arantxa Esteban estudió Bellas Artes en la Universitat Poliècnica de València y, actualmente, se dedica de manera profesional a la pintura. A lo largo de sus veinte años de trabajo, ha montado veinte exposiciones individuales y ha participado en más de cuarenta muestras colectivas. Sin embargo, esta es la primera vez que la artista expone en Burjassot, y lo hace atraía por el ajetreado movimiento cultural del municipio.
Con este trabajo pictórico, compuesto por más de 30 obras originales de dimensiones muy variadas, Arantxa pretende provocar algo más que el simple placer por contemplar arte, desea provocar reflexiones, emociones…y, en última instancia, “provocar una sanación interna del ser humano por el simple hecho de conectar con algo que ya llevaba dentro”.
Hasta el 28 de marzo los vecinos y vecinas de Burjassot podrán contemplar e interactuar con la obra de Arantxa Esteban, ya que muchos de sus cuadros llevan texto incorporado con el fin de generar un diálogo sencillo y claro con las emociones que sus pinturas provocan en el admirador.
