Pérez: "La nueva mayoría que gobierna Benidorm aplica el rodillo para evitar ser declarados concejales No Adscritos"
El portavoz municipal del Partido Popular acusa a los tránsfugas de votar en contra a sabiendas de estar vulnerando la Ley
Sólo el rodillo de los trece votos de la nueva mayoría ha impedido que prosperaran los tres puntos incluidos en el Orden del Día y que incluía también la “disolución del Grupo Municipal Socialista por haber perdido la totalidad de los concejales que lo integraron” , así como la “revocación de los acuerdos de Organización Municipal referidos a las comisiones informativas, Junta de Gobierno Local y grupos políticos de la Corporación”.
Los trece concejales que integran la nueva mayoría de tránsfugas en Benidorm, votaron en contra de dichos acuerdos a pesar de ser alertados por el propio portavoz municipal del PP de que actuaban “contra el ordenamiento jurídico y con expreso conocimiento de que se está vulnerando dicho ordenamiento”. En este sentido Antonio Pérez les recordó que en su momento prometieron o juraron cumplir y hacer cumplir la Ley “y en el Pleno de hoy, -agregó-, votar en contra de lo propuesto no sólo no es cumplir la Ley, sino ir contra ella”.
La nueva mayoría municipal de Benidorm se limitó a votar en contra de las propuestas sin esgrimir ni un solo argumento en contra, hurtando así el debate que merecía la trascendencia y las futuras consecuencias de los asuntos que se estaban dirimiendo. Al término del Pleno, Antonio Pérez anunció que su Grupo Municipal estudiará junto al equipo jurídico las medidas más convenientes para “restituir la legalidad en el Ayuntamiento de Benidorm”.
El portavoz municipal del PP realizó un consistente alegato en contra del transfuguismo basándose en el acuerdo que firmaron los partidos políticos para ponerle coto, evitándolo y sancionándolo en las Corporaciones locales y que figuran en la página web del Ministerio de Administraciones Públicas. Antonio Pérez apeló al espíritu de ese acuerdo sustentado como “un compromiso por el respeto a la voluntad de los ciudadanos y a la lealtad política en los gobiernos locales”.
El concejal portavoz reiteró que en virtud de dicho acuerdo “los derechos económicos y políticos de los miembros no adscritos no podrán ser superiores a los que les hubiesen correspondido de permanecer en el grupo de procedencia”. También recordó que “los Partidos Políticos se comprometen a no aceptar en sus equipos de Gobierno municipal a miembros de la Corporación que se hayan convertido en tránsfugas con respecto a sus grupos de procedencia, rechazando la posibilidad de que por parte del alcalde se efectúe cualquier nombramiento político de atribuciones de gobierno o delegación genérica o especial de las mismas, con los consiguientes derechos políticos y económicos, en favor de los tránsfugas”.
En este sentido recalcó que en el Ayuntamiento de Benidorm “ni se ha evitado ni se ha sancionado el transfuguismo tal y como dicta la Ley” y recordó que “la Ley se modificó en 2006, porque el legislador consideró que los tránsfugas vulneran, atacan y defraudan la voluntad de la ciudadanía expresada libremente en las urnas, la esencia propia de la democracia. Ustedes,-inquirió dirigiéndose a los bancos de la nueva mayoría-, los trece, dejan el Partido con el que concurrieron a las elecciones, con el que pidieron el voto, con el que lo obtuvieron y con el que constituyeron el grupo municipal en representación de su entonces formación política”. Esta situación la subrayó con otras palabras: “ustedes 12, al igual que Bañuls, son concejales no adscritos, porque son tránsfugas, han traicionado, primero, a los votantes del PSPV-PSOE en Benidorm, traicionado al que era su Partido y por cuya candidatura obtuvieron el cargo de concejal, abandonándolo, abandonándolo y dejándole sin representación municipal y, luego, consumando la moción de censura, han traicionado al pueblo de Benidorm”.
Más adelante advirtió que “la Ley permite las mociones de censura, pero no permite beneficios ni políticos ni económicos a los tránsfugas que las consuman” y esgrimió la Ley de Bases de Régimen Local 7/85 reformada por la Ley 57/2003 de 16 de diciembre de medidas para la modernización del gobierno local, cuyo artículo 73.3 que establece que: “a efectos de su actuación corporativa, los miembros de las corporaciones locales se constituirán en grupos políticos, en la forma y con los derechos y las obligaciones que se establezcan con excepción de aquellos que no se integren en el grupo político que constituya la formación electoral por la que fueron elegidos o que abandonen su grupo de procedencia, que tendrán la consideración de miembros no adscritos”. El articulado de la Ley prosigue y nosotros reiteramos que los derechos económicos y políticos de los miembros no adscritos no podrán ser superiores a los que les hubiesen correspondido de permanecer en el grupo de procedencia y se ejercerán en la forma que determine el Reglamento Orgánico de cada corporación”. El último párrafo también es sintomático para el caso de Benidorm: “cuando la mayoría de los concejales de un grupo político municipal abandonen la formación política que presentó la candidatura por la que concurrieron a las elecciones o sean expulsados de la misma, serán los concejales que permanezcan en la citada formación política los legítimos integrantes de dicho grupo político a todos los efectos”. El portavoz municipal concluyó que la situación que hoy presenta el Grupo Municipal Socialista en este Ayuntamiento no es “alegal”, es ilegal”.
