Benidorm expone en el Saló Internacional del Turisme de Cataluña sus experiencias como destino sostenible
Barcelona acoge del 20 al 22 de abril, en el recinto de Fira de Barcelona, la 21ª edición del Saló Internacional del Turisme de Catalunya. En esta ocasión, la ciudad de Benidorm estará representada por su concejal de Turismo y primer teniente de Alcalde, Juan Ángel Ferrer, que en la jornada de hoy viernes participa en una jornada dedicada al ‘Turismo Sostenible: Smart Destinations’. Junto a él expondrán experiencias en este ámbito expertos en promoción turística de ciudades y hoteles, así como profesionales de empresas de energía, movilidad e ingeniería.
En su intervención, el edil de Turismo expondrá el modelo turístico sostenible de la ciudad, “un modelo –ha dicho- reconocido por los expertos y por el que Benidorm apostó desde el principio cuando hace 60 años se construían las bases de la ciudad como municipio turístico”. Un modelo que defiende la arquitectura vertical que posibilita más espacio, más zonas verdes y que toda la ciudad esté orientada al sur. Además, Ferrer ha destacado el cuidado que se tiene en Benidorm en reilación al estado de sus playas y su propio medio ambiente, “atractivos naturales que hacen que Benidorm sea lo que es”.
El objetivo de la jornada ‘Smart Destinatios’ es intercambiar experiencias y plantear nuevas iniciativas para promover los destinos “smart”, más innovadores y responsables con el medio ambiente, que incorporan la tecnología en toda la cadena de valor para ser más sostenibles y competitivos en materias como los servicios, construcción, agua, energía, movilidad, residuos, marketing, agricultura y alimentación, entre otros.
La 21ª edición del Saló Internacional del Turisme de Catalunya se centra este año en los atractivos naturales, gastronómicos y culturales del Mediterráneo, la región turística más importante del mundo. El certamen presentará la oferta de más de 20 destinos mediterráneos, entre los que destacan las costas españolas, Francia, Grecia, Croacia y los países de la “Primavera Árabe” como Argelia, Túnez o Egipto, que quieren recuperar la cuota de mercado perdida durante las revoluciones del año pasado.
